El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, ha anunciado este miércoles que la comunidad continúa con su desescalada, ampliando el aforo máximo permitido del 50 al 75% y permitiendo reuniones sociales de hasta seis personas en espacios interiores y diez en exteriores.
Estas medidas entrarán en vigor el próximo sábado, siempre y cuando el Tribunal Superior de Justicia de Galicia (TSXG) las avale, tal y como ha hecho con las anteriores restricciones planteadas por el Ejecutivo gallego una vez finalizado el estado de alarma, que calificó de "proporcionadas" para garantizar la salud pública.
"Volvemos a proceder a realizar una apertura prudente, proporcional y razonada en función de datos objetivos", ha afirmado Feijóo, quien ha destacado que Galicia cuenta con una incidencia a siete y catorce días de 38,5 y 77, respectivamente, por debajo de la media nacional de 58,2 y 128.
De este modo, el Gobierno gallego remitirá esta misma tarde al TSXG las medidas planteadas por el comité clínico para que las valide cuanto antes, justo un día después de que hubiese ampliado hasta el próximo 29 de mayo las anteriores restricciones.
El incremento del aforo se dará de forma general en todo tipo de establecimientos y en toda Galicia, con la excepción de los municipios en nivel alto y máximo de restricciones, donde se podrá aumentar siempre que el 75% permita mantener la distancia de seguridad de un metro y medio.
El próximo sábado también pasarán a encontrarse en el nivel máximo de restricciones el municipio coruñés de A Pobra do Caramiñal y el pontevedrés de Mos, que se sumarán a Lobios como los únicos en los que habrá toque de queda y cierre perimetral y se prohibirán tanto las reuniones de no convivientes como la apertura de la hostelería.
Más allá de estos cambios, en todo el territorio de Galicia seguirán estando prohibidas las reuniones de no convivientes entre las 1.00 y las 6.00 horas