El Ayuntamiento de Madrid abrirá al público la nueva Plaza de España este 22 de noviembre tras una profunda reforma que cambiará la fisonomía de la ciudad convirtiéndose "en un nuevo polo turístico".
Tras las obras se obtiene "un entorno verde, sostenible y accesible de más de 70.000 m2 que integrará todos los modos de movilidad", pero que priorizará especialmente al peatón como forma de mejorar la calidad ambiental de un espacio en el que se han plantado más de un millar de árboles.
Este punto neurálgico de la capital, que el Ayuntamiento quiere convertir en "nuevo polo turístico" de Madrid, será un espacio más verde, peatonal e integrado con el entorno, conectando el Parque del Oeste, los Jardines de Sabatini, el Campo del Moro, Madrid Río y la Casa de Campo. Además, tendrá un paseo arqueológico, carril bici, zonas de juego para los niños y una cafetería con terraza.