Los díscolos de Vox quieren llegar al debate de la moción de censura con el compromiso -bien amarrado- de que el PP cumplirá su palabra en las cuestiones que les han planteado para lo que queda de legislatura y este jueves, antes del inicio de la sesión en la Asamblea Regional, firmarán un documento para plasmar el acuerdo en papel. “Se firmará un acuerdo interno, que es un punto de partida de trabajo para tener una mínima cautela y que será un documento con líneas programáticas”, tal y como confirma a EL ESPAÑOL una fuente conocedora de las negociaciones.
Los tres votos de los diputados expulsados por Santiago Abascal de Vox -Juan José Liarte, Mabel Campuzano y Francisco Carrera- condicionarán a partir de este jueves algunas de las políticas que desarrolla el Partido Popular en varias áreas del Gobierno regional, como Educación, Servicios Sociales y Medio Ambiente. “Lo que a nosotros nos interesa es abrir determinadas líneas de trabajo en la Comunidad Autónoma: como las garantías de los derechos de los padres sobre la educación de sus hijos, que la gente llama 'pin parental', eso es algo que nos parece importantísimo, pero hay muchas otras cosas como garantizar el principio de neutralidad ideológica”.
Liarte y sus compañeros quieren que la Consejería de Educación, en lo que resta de legislatura, establezca medidas para que prevalezca una "neutralidad ideológica" en los centros educativos de la Región de Murcia, así como "mecanismos para que no pueda haber adoctrinamiento no ya en las actividades complementarias, sino en las propias asignaturas”.
Durante la negociación celebrada -la tarde del miércoles- para definir las actuaciones programáticas que el PP debe incorporar a la labor del Consejo de Gobierno, a petición de los díscolos de Vox, según ha podido saber este diario, otra de las áreas que se ha abordado es la de Servicios Sociales. El portavoz 'díscolo' Juan José Liarte quiere rescatar la ley de Ayudas a la Maternidad, que data del año 2009 y que carece de desarrollo reglamentario.
“Con la situación que hay en la natalidad en España, no desarrollar reglamentariamente una ley de apoyo a la maternidad, no se entiende”, argumenta una fuente de la negociación.
A nivel administrativo y medioambiental, también quieren que el Ejecutivo autonómico que preside, Fernando López Miras, implante la declaración responsable. “Los procedimientos ambientales se podrían tramitar en una tercera parte de lo que están tardando, hay empresarios que cuando ven lo farragosos que son los trámites ambientales en Murcia se van a Valencia”, argumentan.
“Ese sistema consiste en que el empresario, junto a sus técnicos, hacen una declaración responsable y la Administración les permite comenzar con la actividad, pero le inspeccionan para verificar que cumple con esa declaración: eso significa que las empresas van a poder empezar en un mes, en vez de hacerlo en nueve meses y eso supondrá una activación de la economía”.
Colectivos ecologistas en guerra
Esta medida, previsiblemente, levantará en pie de guerra no sólo a PSOE y Podemos, también a grupos ecologistas. De hecho, este miércoles, algunos ecologistas se han manifestado en la Asamblea Regional pancarta en mano: 'Medioambiente y agricultura por separado'.
La declaración responsable es una de las condiciones que han puesto sobre la mesa los parlamentarios expulsados del partido de extrema derecha y al PP no le quedará más remedio que acatar esa petición. Todo ello, para garantizar que este jueves en la votación de la moción de censura se cumple el guion pactado: tumbar la iniciativa que deja muy tocados políticamente a socialistas y naranjas.
“Queremos libertad de empresa”, reivindica a este diario una fuente conocedora de las negociaciones. "Si hay alguna industria que incumple su declaración responsable, pues la levantamos en peso".
El tema de las casas de apuestas y su proliferación en suelo murciano ha sido uno de los argumentos que han esgrimido este miércoles desdes las bancadas del PSOE, Ciudadanos y Podemos contra el PP, en el grupo de los díscolos, que tiene la llave en la votación, consideran que hace falta una ley para proteger a los menores.
Esa normativa sobre las casas de juego iría en consonancia -en parte- con la postura de los parlamentarios de izquierdas, sin embargo, los diputados expulsados por Abascal no comulgan con habilitar un parque de vivienda pública que dependa de la Administración.
¿Díscolos en una Consejería?
Una de las incógnitas que debe resolver la negociación es si Juan José Liarte, Mabel Campuzano o Francisco Carrera entran a formar parte de la estructura del Ejecutivo regional, como ya hicieron los desertores de Ciudadanos que protagonizaron la versión murciana del 'tamayazo': Isabel Franco, Francisco Álvarez y Mabel Campuzano.
"Esa es la línea de trabajo que queremos llevar, no hemos pactado nada de entrar en el Gobierno, tampoco hemos dicho lo contrario, vamos a hacer buenos equipos de trabajo, pero tenemos la esperanza de que en un tiempo no muy largo, a lo mejor, esa colaboración se pueda institucionalizar un poco más", tal y como detalla esta fuente sin descartar la entrada en el Consejo de Gobierno de algún parlamentario al que Abascal echó de su partido.
"Claro que es bueno estar en una Consejería, pero hay un compromiso de trabajo parlamentario que no podemos descuidar, y si tuviera que hacerse nos organizaríamos". Esta fuente de toda solvencia sobre las negociaciones admite que han preguntado al PP por la posibilidad de entrar en el Gobierno autonómico: "Hemos preguntado por ello, si sería posible esto (entrar en una Consejería), y ellos (PP) han dicho que si al final es la mejor manera de ver cómo podemos organizar los trabajos, pues hablaremos de ello. Nos gustaría (una Consejería) solamente sin las circunstancias lo justifican y lo requieren".
Una fuente del PP admite que a lo largo de la jornada, miembros del Grupo Parlamentario Popular han negociado en la Asamblea Regional con los díscolos de Vox asuntos relativos a programas y proyectos políticos. Otra fuente asegura que es "poco probable" que Juan José Liarte, Mabel Campuzano o Francisco Carrera ocupen un sillón en el Consejo de Gobierno, pero a la vista de los acontecimientos vividos en las últimas semanas habrá que esperar cómo se cierra la negociación.