Los agricultores vuelven a ponerse tras la pancarta. Este martes, en Alicante, tomarán las calles para exigir al Gobierno central que los caudales ecológicos del nuevo Plan de Cuenca del Tajo no supongan un recorte al trasvase con el Segura de 105 hectómetros cúbicos anuales. En la víspera de la manifestación, el presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras, ha mandado un recado al presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, para que arrime el ascua y escenifique su defensa del Trasvase Tajo-Segura, como lo ha hecho el presidente de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla.
"Me gustaría poder reunirme también con el presidente de la Comunidad Valenciana y trazar un plan de trabajo conjunto, pero de momento no he obtenido respuesta", tal y como ha subrayado el jefe del Ejecutivo murciano, Fernando López Miras, a preguntas de EL ESPAÑOL.
La última vez que el popular López Miras y el socialista Puig se reunieron fue en la pasada legislatura: en abril de 2018. En aquella cumbre bilateral abordaron asuntos que inquietan a ambas autonomías: el sistema de financiación autonómica, el Corredor Mediterráneo y el Trasvase Tajo-Segura. Desde entonces, en los últimos cuatro años, el Palacio de San Esteban se ha dirigido en varias ocasiones al Palacio de la Generalitat Valenciana con el objetivo de organizar una reunión entre ambos líderes autonómicos, pero la foto no se ha vuelto a repetir por problemas de agenda.
Esa es la excusa que siempre se ha ofrecido desde la capital del Turia. Valga como ejemplo lo ocurrido en abril de 2021, en la Delegación de Gobierno de Almería, cuando el presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, no estuvo en la foto donde el presidente de Murcia, Fernando López Miras, y el presidente de Andalucía, Juanma Moreno, rubricaron una declaración institucional a favor del trasvase. En el texto exigían esto a la Moncloa: "Abordar cuanto antes la elaboración de un Plan Hidrológico Nacional que contemple los principios de solidaridad y equilibrio, y que ponga solución a la situación hidrológica deficitaria que sufre la España seca".
El nuevo Plan del Tajo ha sido interpretado como un amenaza por el Sindicato Central de Regantes del Trasvase Tajo-Segura y este martes tomarán las calles de Alicante para exigir que el Consejo de Ministros no lo apruebe como está redactado. La protesta estará encabezada por el presidente murciano, y 24 horas antes de la movilización, el popular López Miras ha insistido al socialista Puig sobre la necesidad de hacer un frente común entre Murcia, Andalucía y Valencia: "Creo que es importante que en este tema estemos unidos para exigir, precisamente, la continuidad de la infraestructura hídrica más importante de nuestro país".
De momento, en plenas elecciones andaluzas, no parece factible una foto de López Miras, Moreno Bonilla y Puig, ni siquiera una reunión bilateral entre Murcia y Valencia para escenificar la defensa de esta infraestructura hídrica. Pero el recado está mandado y este martes, en Alicante, los populares murcianos y valencianos estarán tras la pancarta.
"El plan del Gobierno central destruirá 15.000 empleos directos, tendrá un impacto económico negativo de 122 millones de euros anuales en el Producto Interior Bruto y afectará a más de 12.000 hectáreas de cultivos", apunta a este diario el presidente murciano, Fernando López Miras, sobre los efectos que tendrá el aumento de caudales ecológicos y el recorte de las aportaciones del Tajo al Segura.
"El trasvase riega el 70% de las frutas y hortalizas que exporta España, creo que son datos más que relevantes, por eso, no nos vamos a quedar de brazos cruzados y llegaremos hasta donde haga falta para defender el trasvase". Y en el Palacio de San Esteban piensan llegar hasta los tribunales, presentando un contencioso, en caso de que la Moncloa apruebe el nuevo Plan de Cuenca del Tajo en los términos en los que está redactado.
- ¿El PP presentará alguna iniciativa en el Congreso de los Diputados?
- Fernando López Miras: Desde el Grupo Parlamentario Popular se ha instado al Gobierno a retirar la modificación unilateral de las reglas de explotación del Trasvase Tajo-Segura, a convocar una Mesa del Agua con todas las comunidades y usuarios afectados para abordar soluciones desde el diálogo y el consenso; y a trabajar para alcanzar un Pacto Nacional por el Agua. Creo que una buena planificación hidrológica pasa por garantizar la suficiencia hídrica para los diferentes usos en todo el territorio español.
El presidente de Murcia considera que la solución para 'la España seca' pasa por retomar la promesa que hizo el expresidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en diciembre de 2017, cuando anunció que impulsaría en el Congreso un Pacto Nacional del Agua con especial atención a las cuencas deficitarias. "Y, en este sentido, creo que la postura del presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, no puede ser más acertada: es necesaria una política hidrológica de carácter nacional, y así lo planteó en su última visita a Murcia en marzo", apunta López Miras.
"Como siempre ha defendido el Partido Popular, es necesario un plan elaborado desde el consenso y un pacto de estado". López Miras insiste en la necesidad de convocar a todas las comunidades para diseñar y negociar una política hídrica nacional: "Basada en criterios científicos y objetivos, no en criterios políticos y partidistas como hemos visto hasta ahora por parte de Pedro Sánchez. Necesitamos un pacto nacional que garantice el agua a todos los españoles como recoge la Constitución, y que lleve el agua desde donde sobra hasta donde falta".