El congreso del Partido Popular de Murcia no aplaca al sector crítico con Fernando López Miras
La 'Ayuso de Murcia' quería ser coordinadora regional y Manuel Durán califica de "despropósito" la propuesta de integración a los sectores críticos.
20 julio, 2022 15:47Las heridas continúan sin cicatrizar en el PP murciano. Cinco días después de celebrarse su congreso extraordinario, sigue sin estar cerrado el nuevo organigrama de partido que debe ayudar a Fernando López Miras a pelear por una mayoría en las elecciones autonómicas de 2023. Los motivos por los que el reelegido presidente de los populares de la Región de Murcia todavía no ha cerrado su nuevo equipo, tienen nombre y apellidos: Patricia Fernández, la alcaldesa de Archena, conocida como la 'Ayuso de Murcia', y el abogado Manuel Durán, exdirector general de Emergencias.
El cónclave debía suponer un punto de inflexión para engrasar la maquinaria electoral y no volver a depender de un pacto con otra formación para seguir al frente del Palacio de San Esteban. Sin embargo, el ruido de fondo continúa en las filas de los populares murcianos.
La clave de esta situación se debe a los problemas para integrar a Patricia Fernández y a Manuel Durán dentro del nuevo equipo del reelegido presidente del PP de Murcia. Todo ello podría provocar una crisis interna en el partido, ya que el congreso corre el riesgo de ser impugnado por alguno de los dos sectores críticos con López Miras, los cuales no formalizaron sus candidaturas a cambio de un proyecto integrador.
En la víspera del congreso se celebró una reunión en el Ayuntamiento de Archena, entre el presidente del Gobierno regional, Fernando López Miras, y la alcaldesa, Patricia Fernández, con el objetivo de visibilizar que las espadas ya no estaban en alto entre ellos. Pero la regidora no acudió al cónclave del viernes y no se pudo materializar una foto de López Miras con Fernández, que escenificase ante la militancia la unidad del partido para empezar a trabajar en la cita con las urnas de 2023.
"Todo se dinamitó en los días previos al congreso porque Patricia Fernández quería ser la secretaria general del PP o la coordinadora general del PP", tal y como asegura una fuente de confianza de Fernando López Miras, presidente del PP murciano. La alcaldesa no fue propuesta para ninguno de esos cargos y no hubo integración del sector crítico liderado por Fernández.
El alcalde de San Javier, José Miguel Luengo, fue reelegido secretario general, y Rebeca Pérez, portavoz en el Ayuntamiento de Murcia, fue designada coordinadora: un puesto de nueva creación en la estructura del PP regional y que gustaba a la alcaldesa de Archena porque es similar al que ocupa el andaluz Elías Bendodo en la dirección nacional que preside Alberto Núñez Feijóo. "Todo el mundo va en la misma dirección, sumar y unir, pero ella va en otra dirección: cada uno es responsable de sus actos".
El motivo por el que 'la Ayuso de Murcia' y López Miras no han firmado la paz varía en función del bando que argumenta los motivos. "Patricia no quería ser secretaria general, el problema es que le ofrecieron una vicesecretaría vacía", según sostiene un partidario de la alcaldesa de Archena. El otro punto de desencuentro ha sido la lista de 22 miembros del nuevo comité ejecutivo. La idea era repartir el 50% para López Miras y el 50% para Fernández, pero no hubo acuerdo en los elegidos.
"Ella ha querido imponer nombres de personas en municipios que iban en contra de las propias direcciones locales: de 11 nombres propuestos, 8 no tenían respaldo de la militancia en sus respectivas localidades", critica la mencionada fuente de confianza de Fernando López Miras. "De 11 nombres propuestos solo incluyeron a dos: ¿Qué integración es esa?", se pregunta un afín a la regidora archenera.
Varias secretarías vacantes
De modo que cinco días después de la visita del presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, todavía siguen sin ser asignados una vicesecretaría y varias secretarías ejecutivas y secretarías de área del Partido Popular murciano.
"Fernando López Miras sacó el 97% del respaldo de la militancia, estuvo avalado por la cúpula nacional y dejó clara su voluntad de seguir uniendo. Hay puestos vacantes de relevancia en el nuevo organigrama". De momento, parece que ninguno contenta a la alcaldesa de Archena porque mantiene el pulso a López Miras sin sumarse a su proyecto.
Patricia Fernández tiene el teléfono apagado y en el Ayuntamiento, su secretaria se limita a tomar nota de las llamadas, mientras asegura que Fernández no está por la Alcaldía. La conocida como 'Ayuso de Murcia' podría terminar de tensar la cuerda impugnando el congreso. Por ahora no ha sucedido, pero algunos militantes que han desempeñado cargos en Murcia admiten a EL ESPAÑOL que la situación que ha quedado tras el congreso no es la mejor: "Hay muchísima incertidumbre entre la militancia".
Tal sensación se ha acrecentado debido a la comida que este domingo protagonizaron más de una veintena de personas, entre las que se encontraba el exdirector general de Emergencias, Manuel Durán; el exalcalde de Murcia, Miguel Ángel Cámara; y el abogado Antonio Jesús Garre. El primero, Durán, acudió el viernes al congreso del PP a anunciar que iba a impugnar el cónclave; el segundo, Cámara, pertenece a la vieja guardia del expresidente de la Región de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, y el tercero, Garre, en el anterior congreso presentó su candidatura para disputarle la presidencia al propio Fernando López Miras. De forma que entre los comensales hubo ruido de sables contra López Miras, ya que este diario ha confirmado que a esa comida también fue invitada la alcaldesa de Archena, aunque finalmente no acudió alegando compromisos familiares.
El exdirector general de Emergencias, Manuel Durán, confirma que mantiene su intención de impugnar el congreso porque sigue sin gustarle la propuesta de integración que le hicieron para retirar su candidatura al congreso y pasar a formar parte del nuevo organigrama regional del PP en Murcia: "Es un auténtico despropósito cómo lo han gestionado".
Durán asegura que en los últimos cinco días no ha recibido ninguna llamada del PP para reconsiderar su decisión de impugnar el cónclave: "El incumplimiento de los compromisos de integración que me dieron no son un motivo de impugnación de un congreso, al final, la impugnación será por vicios y defectos graves en la tramitación y la convocatoria del congreso. En base a eso se impugnará".