El Gobierno de la Región de Murcia ha anunciado que trabajará "para frenar" la propuesta que la Generalitat de Cataluña le ha hecho a la Moncloa, para salirse del régimen común de financiación autonómica para funcionar con un cupo, como lo hacen País Vasco y Navarra. El presidente murciano, Fernando López Miras, considera que sería una "barbaridad" la cesión de toda la capacidad tributaria a la comunidad catalana.
"Nosotros nos vamos a oponer frontalmente desde la Región de Murcia y vamos a articular todos los mecanismos necesarios para frenar esta tropelía", tal y como ha subrayado este miércoles, López Miras, durante la inauguración de la ampliación del Servicio de Urgencias del Hospital Rafael Méndez de Lorca.
"Todo lo que se pide desde el independentismo catalán es una barbaridad e insolidario", según ha reflexionado el dirigente popular. "Lo que piden los independentistas catalanes es inconstitucional: atenta contra el principio del sistema de financiación autonómica que establece que no puede haber sistemas privilegiados en unos territorios frente a otros".
De las palabras del jefe del Ejecutivo murciano se desprende que desde el Palacio de San Esteban, en caso de que el Ministerio de Hacienda se plantee estudiar la independencia fiscal de Cataluña, no se descarta reclamar a la Moncloa que convoque una Conferencia de Presidentes para mostrar su oposición a ese cupo, incluso recurrir al Tribunal Constitucional como ya lo ha hecho para defender el Trasvase Tajo-Segura.
"En una situación normal, esto no debería de preocuparnos, pero claro, con el Gobierno de España que tenemos, debemos preocuparnos y mucho, porque históricamente, los independentistas, desde Cataluña, siempre han hecho reivindicaciones y exigencias que generaban más desigualdad y más discriminación", tal y como ha alertado López Miras.
El presidente murciano ha insistido en que la petición de la Generalitat de Cataluña "es inconstitucional" y solo contribuye a generar "más desigualdad" entre territorios. "El problema no es que los independentistas catalanes planteen peticiones insolidarias, que generan desigualdad y que son inconstitucionales. El problema es que hay un presidente como Pedro Sánchez que está dispuesto a concederles todo lo que pidan, a cambio de seguir siendo presidente del Gobierno".