La larga lista de cargos públicos cazados ebrios al volante no entiende de colores políticos. Durante los últimos años son numerosos los políticos que han recibido el "alto' por parte de la Benemérita y tras hacerles el oportuno control de alcoholemia, han saltado todas las alarmas. La última, este viernes, la vicepresidenta del Gobierno de Castilla y León, Rosa Valdeón, que ha sido pillada tras conducir a más de 170 kilómetros por hora triplicando la tasa de alcohol máxima permitida.
Según la ley, las tasas de alcohol máximas durante la conducción son de hasta 0,5 gramos por litro de sangre o 0,5 miligramos por litro de aire respirado. En el caso de Valdeón, en la primera prueba dio 0,77 y 0,72 en la segunda. El triple. Pues bien, tal y como se recoge en la norma, superar el umbral supone una infracción muy grave que va aparejado a multas de 500 euros y la retirada de seis puntos del carné. Por encima de los 0,60 miligramos, como este caso, la vicepresidenta se enfrentaría a penas de prisión de hasta seis meses y la retirada del permiso de conducir entre uno y cuatro años.
Unas duras sanciones que tampoco tuvieron en cuenta un puñado de compañeros de profesión de Valdeón, que también han sido cazados con alguna copa de más.
Uno de los casos más sonados a nivel mediático fue en 2010 con el por entonces presidente de las Nuevas Generaciones del Partido Popular como protagonista. El diputado Nacho Uriarte era vocal en la Comisión de Seguridad Vial en el Congreso cuando fue sorprendido en otro control de tráfico y superó la tasa máxima de alcohol. Asumió sus responsabilidades y dimitió en su cargo en dicha comisión, pese a que tardó cinco días en hacerlo.
CON ATROPELLO DE UNA ANCIANA
Con una tasa de 0,70 miligramos de alcohol por litro de aire espirado fue sorprendida una concejal del PP del municipio madrileño de Alcorcón. Se trataba de María Pilar Araque Leal, quien al volante atropelló de gravedad a una anciana de 78 años de edad. También dimitió y en este caso 'sólo' 24 horas después.
Aquella misma semana de diciembre de 2013, el alcalde de San Juan de Rambla -también PP-, Tomás Mesa Díaz, superó lo permitido por la norma. La prueba de alcoholemia se la realizó la Guardia Civil después de provocar un accidente en el que resultaron heridas tres personas.
No menos mediático fue el suceso provocado por el ex portavoz del Gobierno del presidente Jose María Aznar, Miguel Angel Rodríguez. El ex político, que pidió perdón públicamente, cuadruplicó la tasa de alcohol permitida después de que con su Mercedes golpease a tres vehículos que estaban estacionados en una céntrica calle madrileña.
Engrosan la lista de populares cazados ebrios al volante el ex diputado del PP por Valencia Vicente Ferrer con 0,84 miligramos en 2012, Carmen Añó, segundo teniente alcalde de Arganda del Rey (Madrid) o la ex alcaldesa de Alfarp (Valencia).
LOS EBRIOS DEL PSOE
Las filas socialistas no se libran de estar en esta lista. El exedil de Seguridad y Tráfico del PSOE en Alcalá de Guadaira (Sevilla), Manuel Garcia Torres, cayó en su propio control del alcoholemia, pero no dimitió.
Tambiéb fueron pillados bajo los efectos del alcohol y conduciendo la concejala de Juventud y Formación del Ayuntamiento de Mahón (Menorca), Indaura Gil Mendoza, y el ex alcalde de Siero, Juan José Corrales.
En 1997, el diputado socialista Javier Barbero se negó a soplar en un control de alcoholemia. A raíz de esa negativa, el Tribunal Supremo dictó una sentencia en la que se señalaba que conducir bajo lo influencia de bebidas alcohólicas sólo se podía castigar penalmente cuando se "produce un indudable riesgo" y que negarse al test de alcohol era sólo una infracción administrativa.
Convergència i Unió tampoco se libra, en su partido fue cazado el alcalde de Mont-ras (Girona), Manel Montalbán.