“b2b no es una central de compras, esto está hecho para otra cosa”. La vicepresidenta del gobierno valenciano, Mónica Oltra, ha criticado duramente este viernes la forma de proceder de Ribera Salud, concesionaria de hospitales valencianos, con su central de compras, la sociedad b2b, con la que factura comisiones confidenciales a laboratorios que venden sus productos en los centros sanitarios, tal y como ha desvelado una investigación de EL ESPAÑOL.
“Decirle a esto central de compras es aventurado”, ha indicado. Oltra ha explicado que la Generalitat Valenciana ya puso en marcha una central de compras en el ámbito sanitario y ha asegurado que lo que hace b2b “es otra cosa”. La vicepresidenta ha apuntado que este caso es un reflejo de lo que ocurre cuando se privatizan servicios básicos y que no es otra que la búsqueda de negocio, si hace falta, utilizando otros caminos ajenos a la Administración. “Cuando se privatiza alguien quiere hacer negocio, bien a través de la concesión, pero ahí hay poco margen y entonces buscan triangular por otros lados, que es lo que es b2b, una triangulación para que la Generalitat pague algo que no está pagando la concesionaria y, por lo tanto, nos sale mucho más caro que de haber comprado directamente a través de nuestra central”, ha explicado.
Oltra ha avanzado que el Consell ha reclamado a todas las concesionarias sanitarias de la Comunidad Valenciana que expliquen y documenten su relación con B2B para saber si esta forma de operar está afectando al “interés general de los valencianos”. Más concretamente, para saber si esta situación está provocando que se esté pagando más dinero por algo que podría lograrse más barato. Es decir, ha apuntado, saber si “alguien está haciendo negocio”.
Esta petición se suma a la que ya hizo el jueves la Conselleria de Sanidad, que se dirigió a Ribera Salud solicitando todo tipo de documentación al respecto de su central de compras al confirmar que la Administración era desconocedora de su forma de operar.
Ribera Salud tiene en concesión hospitales que dan cobertura a más de 636.000 pacientes. El gobierno valenciano tiene entre sus objetivos la reversión de todas las concesiones sanitarias.