Felipe VI ha visitado este martes por primera vez desde que llegó al trono la Conferencia Episcopal, el órgano rector de la Iglesia católica. Lo ha hecho en el 41 aniversario de la proclamación de su padre, Juan Carlos I, en la iglesia madrileña de los Jerónimos, un lejano recuerdo de cómo han cambiado los tiempos en España: El Rey ha estado acompañado por su la reina Letizia, una mujer divorciada tras un matrimonio civil y por la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, casada civilmente y que ha prometido y no jurado su toma de posesión.
En su intervención ante un centenar de obispos, Felipe VI ha recordado el derecho fundamental de libertad religiosa "sancionada constitucionalmente en el artículo 16". El rey ha concentrado sus palabras en la actividad caritatitva y asistencial de la Iglesia que beneficia a cuatro millones de personas en España. "La Iglesia sigue estando al lado de los enfermos, los excluidos, los inmigrantes y todos aquellos otros colectivos vulnerables", ha dicho el Rey.
El presidente de la Conferencia, el cardenal Ricardo Blázquez, ha dado la bienvenida a los reyes y ha pedido a Dios que bendiga a la Familia Real en este 50 aniversario de la creación de esta institución canónica. Carlos I visitó la sede de los obispos en 1993 y en 2001.