Los miembros de Podemos viven el momento más delicado de su corta historia. El partido de los círculos camina rumbo a su segunda Asamblea Ciudadana Estatal, ya rebautizada como Vistalegre II, dividido entre tres corrientes, marcado por la batalla entre sus dos figuras más carismáticas y centrado en una votación que parece un rompecabezas.
El pasado sábado Pablo Iglesias reclamaba que tras el congreso de Podemos se acaben "las corrientes y los bloques" en el seno del partido. Algo que no gustó entre los afines a Íñigo Errejón, que no paran de exigir una formación más plural y con derecho a la divergencia. El propio número dos del partido insistía el domingo en Barcelona en que en Podemos la unidad no se construye "como lo hace el PP, a golpe de dedazo y de silencio", sino "debatiendo, con proporcionalidad y articulando las diferencias para caminar juntos".
Son dos estilos, los de Iglesias y Errejón, que no son antagónicos, ni mucho menos, pero que se han ido alejando con el tiempo. Ahora, pese al acuerdo de mínimos alcanzado el sábado sobre la organización de Vistalegre II, en Podemos esas "corrientes" están más diferenciadas que nunca. De hecho, las tres principales familias, pablistas, errejonistas y anticapitalistas, compiten en una consulta a las bases que se antoja decisiva para el futuro del partido morado. Y, aunque lo parezca, no es un rompecabezas.
Qué se decide
Los inscritos están votando desde este domingo y hasta el próximo martes para elegir el sistema de votación que se utilizará en la Asamblea Ciudadana que se celebrará entre los días 10 y 12 de febrero en Madrid. Pablo Iglesias convocó este referéndum a las bases que irritó a sus rivales internos porque desconocían la propuesta. Lo que se decide son dos cosas principales: qué fórmula se usa y qué se vota exactamente. Se trata, en suma, de una votación sobre una votación.
Quién compite y con qué propuestas
Compiten varios proyectos, pero los principales son tres que se corresponden con otras tantas corrientes del partido morado. Los pablistas compiten bajo el nombre de "Podemos para todas" y proponen un sistema electoral, llamado "Desborda" por su creador, Pablo Echenique, que se basó en el sistema Borda, el mismo que se utilizó recientemente en las primarias de Madrid. Iglesias y sus afines quieren que en Vistalegre II se vote conjuntamente tanto los documentos que regirán el partido como las candidaturas de las personas que tendrán que dirigir la nave.
Los errejonistas, agrupados bajo el lema "Recuperar la ilusión", no han bautizado el sistema de votación que proponen, pero dicen que es "un sistema proporcional puro" que garantiza mejor que ningún otro que cada lista obtenga una representación según los votos obtenidos. El gran debate abierto en el seno de Podemos es que este sector de Errejón quiere separar "los proyectos de las caras", lo que, en otras palabras, consiste en que por un lado se voten los documentos organizativos y por otro se voten las candidaturas personales.
Por último, los anticapitalistas, con "Podemos en movimiento", defienden un sistema de votación llamado Dowdall, una variación del citado Borda. Y, respecto a qué se debe votar, defienden una suerte de vía intermedia entre los otros dos sectores: votar conjuntamente las listas y una parte de los documentos y, después, votar sobre el resto de documentos.
Una dura campaña
En los últimos días, la campaña de unos y otros para que las bases elijan sus propuestas está siendo más que intensa. Este domingo, Iglesias hacía una demostración de fuerza presentando "Podemos para todas", incluida su candidatura a la secretaría general, rodeado de muchos y muy diversos miembros de Podemos: Echenique, Irene Montero, Juan Carlos Monedero, Carolina Bescansa, Juanma del Olmo, Diego Cañamero y un largo etcétera.
Además, los errejonistas están haciendo hincapié en criticar el sistema "Desborda" urdido por Echenique. Aquí siguen algunos ejemplos:
Por su parte, Echenique ha arremetido en varias ocasiones contra sus compañeros errejonistas como respuesta a las críticas. Unos y otros, en todo caso, pelean en las redes sociales con uñas y dientes.
Qué consecuencias habrá
Aunque todos en Podemos tratan de restar dramatismo a la consulta, lo cierto es que este referéndum es la primera batalla entre Iglesias y Errejón en la corta historia de Podemos. Quien venza saldrá más que reforzado, lógicamente. El favorito es Iglesias, pero para los errejonistas esta votación sirve también como forma de medir sus fuerzas. Hasta ahora, Errejón ha dicho que no piensa disputar la secretaría general a Iglesias en Vistalegre II, pero si ganase esta primera batalla, algunos de los que le rodean le animaría a hacer la guerra en la Asamblea Estatal.
Además, si gana Iglesias y, por ello, se impone su intención de que se voten conjuntamente listas y documentos, "caras y proyectos", los errejonistas estarán ante la tesitura de elegir si se rinden o si se atreven a presentar una candidatura alternativa al actual secretario general.
Noticias relacionadas
- Iglesias lanza su campaña para Vistalegre II y defiende que su proyecto es el "mejor"
- Podemos y la gestora del PSOE apoyan la marcha de los sindicatos contra la política laboral del Gobierno
- Errejón sugiere que el final de las corrientes que pide Iglesias lleva a la "uniformidad" del PP
- Mónica Oltra: "Hay que respetar a las mujeres que prefieren prostituirse a limpiar pisos"
- Iglesias anuncia la "refundación" de Podemos en Vistalegre II y pide no ser "un campo de batalla"
- El equipo que organizará Vistalegre II: tres errejonistas, tres pablistas y un anticapitalista