El autobús naranja de los ultracatólicos de HazteOir contra los niños transexuales ha sido detenido por la Policía Municipal de Madrid. El delegado de Seguridad del Ayuntamiento, Javier Barbero, ha celebrado haber interceptado "el vehículo de la vergüenza" y ha reiterado que el Gobierno municipal hará todo lo posible para expulsarlo de la ciudad lo antes posible.
De momento, los agentes municipales han bloqueado la circulación del autobús que enarbola el mensaje "Los niños tienen pene y las niñas tienen vulva, que no te engañen" en base a una ordenanza, la de publicidad exterior. "Nadie puede colocar anuncios sin permiso y sin ajustarse a la ordenanza". Además, se ha presentado "inmediatamente" una unidad policial de Gestión de la Diversidad para dilucidar si también se ha producido un delito de odio. El vehículo, según ha podido saber este periódico, no ha podido ser requisado y HazteOir, más allá de la sanción y esta primera detención policial, todavía dispone del autobús.
El discurso del odio
"Veremos cuál es exactamente el delito. No sé si será de odio, pero tengo muy claro que han enarbolado el discurso del odio", ha opinado Barbero.
La ley regional aprobada el año pasado en busca de la protección del colectivo LGTB "prohíbe cualquier acto de discriminación directa o indirecta, por razón de orientación sexual, identidad de género, expresión de género o pertenencia a grupo familiar". También "garantizará la protección efectiva contra cualquier discriminación".
Tanto el Ayuntamiento como la Comunidad de Madrid han puesto sus equipos jurídicos a trabajar en este asunto y en los próximos días se presentará una denuncia ante la fiscalía. La posición de los grupos políticos ha sido unánime: en contra del vehículo contra la transexualidad.
HazteOir, por el simple hecho de haber circulado mostrando publicidad sin permiso, será multado, aunque todavía no se conoce la cuantía de la sanción.
¿Por qué?
Consultados por este periódico, los activistas de HazteOir relataron que su autobús, cuyo viaje sólo acaba de empezar, pretende contestar a la asociación Chrysallis Euskal Herri, que lanzó la siguiente publicidad en marquesinas de País Vasco y Navarra: "Hay niñas con pene y niños con vulva. Así de sencillo".
El autobús ultracatólico, que recorrerá varias capitales de provincia si la ley no lo impide, publicita su "libro prohibido", un trabajo con el que denuncian que el sistema de enseñanza "se haya entregado a gays, lesbianas y transexuales". En la portada, aparecen dos niños saludando a la romana, cual fascista, a una bandera del colectivo LGTB. "¿Saben lo que quieren enseñar a tu hijo en el colegio?", preguntan. “Es mucho lo que nos jugamos. Combatir esta nueva forma de adoctrinamiento ideológico es una obligación de todos”, se puede leer en la cubierta del libreto.
Por su parte, la Delegación del Gobierno en la Comunidad de Madrid ha informado de que remitirá denuncia al Ministerio Fiscal tras el Informe de la Abogacía del Estado. Según el mismo la circulación del autobús podría ser constitutiva de los delitos tipificados en el artículo 510.1 a) y 510.2.A) del Código Penal.