Políticos británicos de Alicante empiezan a pedir la nacionalidad española por miedo al 'brexit'
Representantes de las agrupaciones británicas de la provincia de Alicante: "Queremos seguir trabajando por nuestros compatriotas".
4 abril, 2017 02:28George Thomas tiene 76 años, es escocés, ha trabajado por todo el mundo y desde hace 18 vive en Jávea, un municipio de la costa alicantina donde los británicos son la primera colonia extranjera. Hay censados 4.966 vecinos de Reino Unido en una población de 27.300 habitantes empadronados.
Thomas entró en política hace años, preocupado por el medio ambiente y el boom de la construcción. “De repente todo eran grúas, grúas y más grúas”, dice. Ahora es el presidente del PSPV-PSOE de esta localidad. El alcalde, el socialista José Chulvi, explica que el de presidente es un cargo honorífico por sus años de dedicación y compromiso con el partido. Thomas es militante desde hace 14 años, llegó a ir en listas y participó en la última campaña local en la que los socialistas arrasaron. Es algo así como la voz del pueblo inglés para el alcalde.
Enfadado por el brexit, ha iniciado los trámites para pedir la nacionalidad española. “Tengo 76 años, no quiero que en unos años España esté obligada a imponer condiciones a los británicos, he decidido hacer los trámites para tener la nacionalidad española, estoy más en casa en España que en el Reino Unido”, adelanta.
No es el único británico que ya ha iniciado los trámites para ser español. Carole Elizabeth Saunders tiene 61 años y es concejala de Calpe (Alicante) desde hace seis años. Actualmente ocupa la concejalía de Participación Ciudadana, Transparencia, Asociacionismo y Mayores con el PP.
A ella el brexit le afecta de lleno. “Solo los ciudadanos de la Unión Europea pueden ser concejales, he iniciado los trámites (para pedir la nacionalidad) porque quiero seguir mi trabajo por los británicos en mi pueblo”, cuenta. Saunders lleva viviendo entre Calpe y Benissa, la localidad vecina, desde hace 25 años.
Su caso es similar al de Thomas. Ambos conocían la costa alicantina de sus veranos de vacaciones y acabaron por comprarse un chalé para vivir sus años de jubilación. También ella se metió en política tras años de involucrarse en colectivos ecologistas.
Los británicos también son la primera colonia extranjera de Calpe. Son más de mil en una población censada de 19.600. Como en Jávea, en este municipio la población se duplica en verano gracias al turismo.
Suzanna McAllister es concejala popular de Residentes Europeos y Sanidad de Llíber, otra localidad de Alicante (más al interior pero cercana a la costa) donde los británicos son justo la mitad de los 1.100 vecinos censados. Su preocupación es cómo va a quedar la atención sanitaria para sus compatriotas. Ella, de momento, no ha iniciado los trámites para solicitar la nacionalidad. “Estoy esperando las negociaciones entre Reino Unido y la UE, si llegan a un acuerdo para proteger los derechos creo que no sería necesario, si no es así, sí iniciaré los trámites”, explica.
La provincia de Alicante, principalmente su zona costera, es la de mayor número de habitantes británicos. Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), casi 73.000 viven en urbanizaciones de Orihuela, Torrevieja, Rojales, San Fulgencio, Benidorm, Calpe o Jávea. La inmensa mayoría, se trata de antiguos veraneantes que escogieron trasladar su residencia a estas localidades para disfrutar de la jubilación. Muchos viven ‘aislados’ de la población. Son gente mayor que no hablan castellano y con pocas intenciones de solicitar la nacionalidad, según cuenta McAllister. Otros, como ella, Sounders y Thomas optaron por involucrarse políticamente en sus municipios.
De una gran cervecera a Jávea
George Thomas vino a España a trabajar hace 27 años. Fue el director general de “la mayor fábrica de cerveza” del Reino Unido. Estuvo un año en Madrid y cuatro en Cataluña. De Madrid recuerda que no le gustó mucho la ciudad. “Demasiado tráfico”. Ya entonces, hablaba francés e italiano y aprendió el castellano por su cuenta. Ahora también habla alemán, ruso y con nociones de árabe. Tiene tres hijos que viven en Londres o alrededores y que se han casado con ciudadanos de Arabia Saudí, Estados Unidos y Ecuador. “Tengo once nietos, algunos nacidos hasta en Hong Kong… somos internacionales”, bromea. Antes de llegar a España, trabajó en Rusia, en los países de la antigua URSS, en Praga, el Caribe…
Él está totalmente en contra del brexit y todo lo que suponga crear nuevas fronteras. Sus tres hijos votaron para salir de la UE, sus nietos para quedarse. “Es un tema generacional”, recalca. Con sus hijos no habla del asunto. “No hablamos de esto porque no estamos de acuerdo”, matiza.
A los 58 años, Thomas sufrió un pequeño problema cerebral y llegó a un acuerdo de jubilación anticipada. Como ya tenía un chalé en Jávea, se vino a vivir a España. Han pasado 18 años desde entonces. “Yo no estaba muy interesado en la política, pero poco a poco he ido viendo que la construcción estaba arruinado el paisaje, no esperaba esto cuando vine aquí a jubilarme”, relata. Así que acabó militando en el PSPV-PSOE y se hizo amigo hace diez años de quien hoy es el alcalde. “Entonces él era muy joven (el actual regidor tendría unos 35 años), ahora ha aprendido inglés y hasta lee discursos en inglés”, recalca.
Thomas comenzó traduciendo artículos al inglés, publicando versiones inglesas de las páginas de Facebook del partido… todo para llegar a una parte importante de la población. Del brexit habla muy molesto porque no pudo votar. Dice que cuando se enteró del resultado sintió lo mismo que cuando Donald Trump llegó a la presidencia de Estados Unidos. “Este año es un desastre”, mantiene.
Y lo dice porque además este año ha sido el del gran incendio que asoló Jávea este verano. “Fui desalojado de mi casa, me había roto una pierna un poco antes”, relata. Su vivienda no sufrió daños finalmente. Él ya ha iniciado los trámites y hecho el examen de la Constitución y la realidad socioeconómica de España. También ha superado con un 93% el de castellano. El trámite es complejo pero ya está casi al final del trayecto.
El trámite para la nacionalidad
Carole E. Sounders también ya ha comenzado el camino para el cambio de nacionalidad. “Yo ya no voy a regresar a Gran Bretaña, me voy a quedar aquí”, asegura. En su caso, apunta, necesita pedirla para poder seguir trabajando como concejala por Calpe cuando se formalice la salida de la UE. Es la segunda legislatura en la que forma parte de la corporación municipal. Su vinculación le llegó por su interés en el medio ambiente y el activismo local.
“En mi familia siempre ha habido tradición política, mi bisabuelo fue el primer alcalde de Heywood, cerca de Manchester, y mi hermana mayor fue concejal conservadora de Ribble Valley Council”, explica a modo de relato personal en el currículum que tiene colgado en la web del ayuntamiento. Su primera experiencia política fue hace 30 años cuando ayudó en la campaña electoral de su hermana. Ahora siente que si quiere seguir en política tiene que nacionalizarse española. “Quiero seguir con mi trabajo para los británicos y los mayores de mi pueblo”, subraya.