Agentes de la Guardia Civil enviados por la Audiencia Nacional se han presentado esta mañana en el edificio Grey D'Albion de Puerto Banús, el cuartel general desde hace años de Rifaat Al Assad, tío del actual presidente de Siria y una de las personas más conocidas del puerto marbellí. Los agentes especializados en lucha contra el crimen financiero llevaban bajo el brazo 15 órdenes de entrada y registro, tres requerimientos y una orden para bloquear cuentas corrientes de 16 personas relacionadas con el empresario sirio afincado en Marbella, investigado ahora por blanqueo de dinero.
En total, el juez José de la Mata, encargado de la investigación desde el Juzgado de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, ha bloqueado 76 cuentas bancarias, tanto de personas físicas como jurídicas en una investigación que emana de la Justicia francesa. Apodado El Carnicero de Hama por su violencia en la represión de la oposición local y su poder al frente del ejército del país, fue expulsado de Siria en los años 80 por su hermano Hafez Al Assad, ante el miedo de que organizara contra él un golpe de estado. Desde entonces y tras pasar por Francia, Rifaat Al Assad se ubicó en Marbella, donde su patrimonio inmobiliario y el capital de sus empresas supera los 691 millones de euros.
Imputado en Francia
Los investigadores sospechan que con su salida del país, Al Assad transportó 300 millones de dólares de las arcas públicas sirias, que invirtió en distintas propiedades inmobiliarias. Ahora la Audiencia Nacional investiga su patrimonio en Francia, Curaçao, Liechtenstein y Luxemburgo. La Justicia gala cifra en 90 millones el patrimonio que Al Assad tiene también en el país.
En 2016 la Justicia francesa le imputó por el encubrimiento y desvío de fondos del Estado sirio, blanqueo y banda organizadas. En España. la investigación se inició en diciembre del mismo año tras una denuncia de la Fiscalía de la Audiencia Nacional. Fruto de esa investigación se detectó en España una red de sociedades controladas en realidad por dos de sus hijos y varias mujeres que presuntamente sirven para gestionar el patrimonio del tío del presidente sirio. Entre sus propiedades se encuentra por ejemplo una finca de 33 millones de metros cuadrados en ocupa un tercio de la localidad malagueña de Benahavis. Solo ese terreno tiene un valor de mercado de 60 millones de euros.
Junto a Al Assad, la Audiencia Nacional investiga también a seis de sus hijos y a un financiero español acusado de gestionar el patrimonio desde empresas tapadera en el extranjero.