La dirección nacional de Génova no ha mostrado ningún signo de complicidad con Esperanza Aguirre, la portavoz del PP en el Ayuntamiento de Madrid que aupó a Ignacio González, detenido por la Operación Lezo, hasta lo más alto de la Comunidad madrileña. Desde que el sucesor de Aguirre en la Real Casa de Correos fue arrestado el miércoles, nadie de la plante noble de Génova se ha acercado a Aguirre ni la ha defendido públicamente a la presión política y mediática que la insta a presentar su dimisión como portavoz del Ayuntamiento de Madrid. La consigna que se ha enviado a todos los estamentos del partido es dejarla "que llore sola".
Con el arresto de González, la figura de Esperanza Aguirre para el PP está "totalmente amortizada". Fuentes solventes de la dirección nacional del PP mantienen con rotundidad que "no volverá a ser" candidata a la Alcaldía en las elecciones de 2019 "de ninguna de las maneras" y ahora solo esperan su dimisión tras el escándalo que está protagonizando este día quien fuera su mano derecha. Pero saben que "no será pronto" ni "fácil".
Las mismas fuentes recuerdan que fue Esperanza Aguirre la que dimitió de la presidencia del PP de Madrid tras los escándalos de corrupción que asoló al partido en 2015 por el que entonces fue su mano izquierda, Francisco Granados, y se preguntan qué hay de distinto en este caso para que ahora se vaya "ya, de verdad, definitivamente" de la política.
Pero nadie marca los tiempos a Esperanza Aguirre y Mariano Rajoy lo sabe. El miércoles, cuando desde Génova deslizaron la idea de que presentara su dimisión esa misma tarde, el entorno de la expresidenta se apresuró a dejar claro que "es falso de toda falsedad" que fuera a abandonar su asiento en el Ayuntamiento de Madrid. Este viernes se filtró también la idea de que se iría si el juez enviaba a Ignacio González a prisión. El círculo de la exlideresa también desmintió esa posibilidad. Porque el cómo y el cuándo lo decide única y exclusivamente Aguirre.
"Que se cueza en su propia salsa"
Conscientes de que es "un alma libre" que "hace lo que le da la gana", en Génova han optado por ignorar por completo a su portavoz en Madrid y "que se cueza sola en su propia salsa". No obstante, los cálculos que hacen en la dirección nacional del PP es que presentará la dimisión "a su estilo: dando un portazo, en el momento en el que a ella le convenga". Ese momento confían que sea "más pronto que tarde".
Por su parte, Esperanza Aguirre reunió el viernes a todo su Grupo Parlamentario Municipal para proyectar un mensaje de unidad y lanzar la imagen de que su equipo la apoya. La oposición en bloque, sin embargo, ha sido unánime y le ha pedido públicamente que se aparte de la vida pública. La alcaldesa Manuela Carmena reconoció que "no está en una condición adecuada para formar parte del Consistorio porque vicia la relación".
La oposición pide su dimisión
Preguntada sobre si debería dejar el acta, Carmena no se la pidió, pero insistió en que debe "asumir" lo que está ocurriendo porque "para el Ayuntamiento no es bueno que una persona esté en esa situación". También Begoña Villacís, portavoz municipal de Cs, ha instado a Aguirre a dar un paso atrás. "Tiene que saber asumir las responsabilidades políticas". En la misma línea se ha mantenido el PSOE. Su portavoz Puri Causapié aseguró que "con la detención, el cerco se cierra cada vez más sobre Aguirre". La última palabra, como recuerdan desde Génova, la tendrá la propia Esperanza Aguirre.