Santamaría se defiende tras sus declaraciones: "Perdieron la cabeza con el procès"

El Senado se ha convertido este lunes en el último ring donde el Gobierno y los grupos independentistas se han echado toda la hemeroteca a la cabeza a tres días del 21 de diciembre. La vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría acudió a la Cámara Alta a rendir cuentas por la aplicación de 155 y aprovechó su intervención para insistir en las polémicas declaraciones que hizo este fin de semana: "Perdieron la cabeza con el independentismo y el procès. El 155 ha descabezado la Generalitat", insistió desde la tribuna de oradores de la Cámara Alta.

La 'número dos' del Ejecutivo se encaró directamente con el senador Josep Lluís Cleries, que la acusó de haber descabezado "partidos democráticos" y afirmar que le recordaba al "fascismo" y al "totalitarismo". El portavoz de Convergència Democrática de Cataluña cifró en "332" el número de empresas que se han ido de Cataluña desde el 1 de octubre y culpó al Ejecutivo de Mariano Rajoy de "promover a huida de empresas". Antes de concluir, recordó a los Jordis, al consejero Joaquim Forn y a Oriol Junqueras. "Usted se va a comer el turrón en casa", le dijo a Santamaría, mientras que sus compañeros independentistas siguen en prisión.

En su turno de réplica, la vicepresidenta criticó con cierta ironía que los portavoces de los grupos parlamentarios vean ahora mal que ella misma haya aceptado rendir cuentas ante el Parlamento sobre la aplicación del 155. "Tienen usted la piel mucho más fina que la lengua", criticó. "Les molesta que se diga en los mítines que ERC y Puigdemont han perdido a sus líderes". La vicepresidenta quiso dejar claro que la normalidad en la jornada electoral está asegurada porque ya se ha hecho una simulación del proceso de escrutinio y se ha hecho "sin incidencias".

A tres días de la cita con las urnas, Cleries quiso poner sentimiento en su contrarréplica y quiso insistir en que la fotografía que el Gobierno dibujó sobre Cataluña es falsa. "Si algo es Cataluña es solidaria con todo el mundo. Es un sociedad de convivencia, de cohesión. Y yo nunca hablo en nombre de todo el mundo. Fíjese que siempre hemos pedido un referéndum para que hablen todos".