Fue durante el último tramo de su intervención en la comisión de investigación de la financiación irregular del PP cuando Esperanza Aguirre animó a todos aquellos que se resisten a dimitir a que "en casa se está muy bien". Acto seguido quiso dejar claro que "no" lo decía por su compañera de partido, Cristina Cifuentes, hoy presidenta de la Comunidad de Madrid.
El momento más tenso de la comisión fue durante las dos intervenciones de Gabriel Rufián, que hizo las mismas preguntas a Ignacio González que a su antecesora. El tono y la agresividad que utilizó en sus comparecencias hizo perder los nervios al presidente de la comisión, Pedro Quevedo, que le advirtió en más de una ocasión que le iba a echar de la sala.
Otro de los choques más destacados fue cuando Rufián llamó "palmeros" a los diputados del PP presentes en la sala. De nuevo intervino el presidente de la comisión, que le afeó que solo quiera un titular y no se centre en el objeto de la comparecencia. "Usted no llama palmeros a representantes políticos. Llame palmeros a los que palmean", dijo Quevedo. "Y como no ha habido aplausos ruego que se abstenga de montar el pollo al que está acostumbrado", continuó el presidente.
Aguirre se desvinculó también de todas las acusaciones y reconoció que se avergonzaba de muchas cosas, "pero no te las voy a contar a ti". Otro momento tenso de la comparecencia fue cuando Ignacio González escuchó de Rufián si se sintió "un preso político" por haber estado siete meses en prisión. "Eso se lo dejo a ustedes", respondió el expresidente de la Comunidad de Madrid, que le reconoció que "me avergüenzo de muchas cosas" pero de las acusaciones por las que está en libertad provisional "no".
Rufián también preguntó a González si podía confirmar que "M. Rajoy" es el presidente del Gobierno, a lo que respondió que "no sé a qué se refiere". El parlamentario independentista también indagó por la caja B del PP. "No conozco ninguna caja B", replicó el expresidente. "¿Se benefició de esa caja?", insistió Rufián. "No conozco ninguna caja B", insistió el compareciente.
El catalán le dijo al compareciente cómo se sentía, si como un "negligente" o como "un colaborador necesario". "Ni soy una cosa ni la otra porque no he participado en la financiación del partido", insistía González. Rufián también quiso saber "hasta dónde sabía Aguirre de sus actividades" y su "archiamigo" Francisco Granados, preguntas a las que tampoco respondió. "Pregúntele a ellos".
Rufián quiso escuchar de la boca de Ignacio González cómo definiría el expresidente de la Comunidad de Madrid a Francisco Granados, pero no quiso "entrar en consideraciones de carácter personal". También le preguntó cuándo "empezó su mala relación", otro balón que no quiso parar el expopular. "No voy a entrar en consideraciones de tipo personal".
González insistió en que no protege "a nadie" y que es "falso" que haya robado. "Deje de manipular", le pidió el compareciente antes de concluir que "nunca he ordenado a nadie que contratase y pagase al señor De Pedro". Antes de finalizar, Rufián le preguntó si había visto la película de El Padrino. Una pregunta que Ignacio González se negó a contestar. "¿Quién es el señor Vito Corleone en todo esto?", a lo que el compareciente zanjó: "Nunca he participado en ninguna cosa de estas se ponga usted como se ponga".