Los nacionalistas vascos quieren más autogobierno. El PNV y EH Bildu ha alcanzado un nuevo acuerdo para la reforma del estatus político del País Vasco, que en este caso se centra en el apartado competencial e incluye la reclamación de la capacidad para regular referéndums y de las competencias sobre la Seguridad Social y la política penitenciaria.
El acuerdo entre PNV y EH Bildu, alcanzado este miércoles en el marco de la Ponencia de Autogobierno del Parlamento Vasco, se suma a los ya logrados en las últimas semanas entre ambas formaciones sobre el preámbulo y el título preliminar que debería incluir un eventual nuevo estatuto, en las que se reivindica el derecho a decidir para avanzar hacia una relación "bilateral" entre País Vasco y el Estado español.
Al igual que ocurrió con las propuestas sobre el preámbulo y el título preliminar, las bases acordadas por el PNV y EH Bildu sobre las competencias que debería recoger un futuro estatuto no han contado con el respaldo de Elkarrekin Podemos, el PSE-EE ni el PP.
En el texto aprobado este miércoles, se plantea "reafirmar el espacio de poder reconocido en el vigente Estatuto de Gernika", pero que aún no ha sido transferido a las instituciones vascas por parte de la Administración central. Además, se reclama "recuperar" la capacidad competencial transferida, aunque "severamente menguada" por la legislación estatal y por la jurisprudencia del Tribunal Constitucional.
El PNV y EH Bildu también aspiran a ampliar las competencias de las instituciones vascas, con el fin de asumir las materias necesarias "para garantizar los derechos políticos, económicos, sociales, lingüísticos y culturales" de los ciudadanos vascos.
El documento aprobado por ambas formaciones, al igual que el resto de textos que se debaten en esta fase de la ponencia, es un borrador susceptible de modificación en posteriores fases de tramitación y debate.
"Fondo de poder vasco"
En todo caso, el documento establece la necesidad de que el "nuevo marco de relación" que se pueda dar entre País Vasco y el Estado español incorpore una 'cláusula residual de competencia'. Dicha cláusula se ha de decantar -según se plantea en el texto- "a favor" del País Vasco en las materias cuyo ámbito de decisión política "no haya sido reservado expresamente al Estado español", de forma que el resto de las materias "formarán parte del fondo de poder vasco".
Además, se establece que el nuevo estatuto configurará "una suerte de Concierto Político" y un marco de relación "confederal" entre País Vasco -o la nueva denominación que se pueda establecer en el futuro estatuto- y el Estado. Ambos partidos plantean que el nuevo estatus al que pueda acceder Euskadi permita a las instituciones vascas "desarrollar políticas públicas propias completas de convivencia y profundización democrática, incluida la capacidad para regular consultas ciudadanas o referéndums".
Los ámbitos competenciales recogidos en la propuesta se dividen en tres bloques. En el primero, se incluyen las competencias "de carácter exclusivo" que "expresan con especial intensidad la preservación del hecho diferencial". Entre ellas, se citan la lengua, el deporte y la cultura, la educación, la sanidad, la seguridad, el empleo público, el derecho civil, el régimen del Concierto Económico y la organización territorial propia.
En el segundo bloque se atribuye a las instituciones vascas "la titularidad demanial y/o patrimonial" de los recursos naturales de su ámbito territorial, del que se indica que "se extiende hasta el mar territorial", y de "las infraestructuras sitas en el mismo".
"Amplias competencias"
La propuesta recoge un tercer bloque, que otorga a las instituciones vascas las competencias "exclusivas" relacionadas con el sistema de relaciones laborales, de protección y Seguridad Social. En este apartado se establece que el estatuto recogerá "mecanismos de cooperación y solidaridad" con el Estado español.
Por otra parte, el PNV y EH Bildu proponen que País Vasco disponga de "amplias competencias" en el ámbito de la acción exterior, así como una "capacidad de representación" en las organizaciones europeas e internacionales.
En otro apartado del borrador se alude a la necesidad de "preservar y reforzar" el Concierto Económico, para lo que se reclama que este sistema se amplíe a "todos y cada uno de los órdenes de naturaleza económica: financiero, económico y tributario-fiscal".
En este ámbito, plantean "ampliar el espacio" para la elaboración de una legislación propia en materias como las leyes de contratos públicos y de subvenciones. Asimismo, PNV y EH Bildu aspiran a que País Vasco disponga de "competencia plena e incondicionada" para realizar "su propia política de crédito y deuda pública".
Por otra parte, se propone establecer un "sistema de garantías" que garantice una relación "confederal" entre País Vasco y el Estado español, basada "en el pacto, el respeto y el reconocimiento mutuos". Con ese fin, se solicita la creación de una Comisión Mixta del Concierto Político.
Tras la reunión de la Ponencia, el portavoz del PNV en el Parlamento Vasco, Joseba Egibar, ha reconocido que hay margen para poder "ampliar" los acuerdos que se están logrando en este foro, y ha recordado que su grupo aspira a lograr el mayor grado de entendimiento "posible" entre los grupos.
En una línea similar, la portavoz de EH Bildu, Maddalen Iriarte, ha mostrado su deseo de poder lograr acuerdos "más amplios" en los próximos debates de esta ponencia, aunque ha rechazado sentir "vértigo" ante la posibilidad de que la propuesta definitiva para la reforma definitiva del estatuto se apruebe con los únicos apoyos del PNV y EH, formaciones que suman 46 de los 75 escaños del Parlamento.
Por su parte, Lander Martínez (Elkarrekin Podemos) ha reconocido que se ha producido un "intento de acercamiento sincero" con el PNV, aunque finalmente no ha sido posible llegar a un acuerdo. No obstante, ha subrayado que no se debe "dramatizar", y que sigue habiendo posibilidades de llegar a pactos más "amplios" en los próximos meses.