A José Ramón García-Hernández le gusta que le llamen Joserra y que la erre suene fuerte. Erre de renovación, de revivir, de recuperar. Abulense de nacimiento y diplomático de formación, tiene muy claro que el nuevo Partido Popular debe edificarse sobre los valores humanistas que él representa. Fue el primer candidato a suceder a Mariano Rajoy que desveló sus cartas y dice que no va a renunciar a pelear este partido hasta el final, aunque sepa mejor que nadie que hay otros jugadores que parten como favoritos en todas las apuestas.
Joserra se presentó a esta carrera para reconstruir un Partido Popular que se quedó "huérfano de ideas" por el desgaste que supone estar en el Gobierno. Confiesa que si él hubiera sido Mariano Rajoy hubiera aplicado con más mano dura el 155 en Cataluña. Pero respeta y habla con muchísimo respeto sobre el todavía presidente del PP, su presidente, con quien ha hablado pero prefiere no desvelar el contenido de su conversación.
Si ganara estas primarias, lo primero que haría es invitar a comer a los cinco candidatos restantes para hablar sobre el nuevo PP. Primer aviso para los tres favoritos. Joserra es un tipo afable que solo propina buenas palabras a sus contrincantes. A los militantes solo pide que voten el jueves con el corazón para que el candidato que gane el 5 de julio sea proclamado presidente en el congreso del 20 y 21 de julio. Digan lo que digan los compromisarios.
¿Cómo lleva la campaña?
La llevo bien, porque cada día es nuevo y distinto. Todos los demás candidatos están convergiendo en mi discurso, un discurso de valores bien identificados del PP: liberalismo, conservadurismo y humanismo cristiano para hacer políticas modernas y regeneración del partido poniendo el foco en el candidato. Además, hay mucha gente que cuando voy a las sedes me manifiesta su apoyo y muchos ya me llaman Joserra.
¿Quién es Joserra?
Un abulense, diplomático de carrera y doctor en filosofía política sobre liberalismo que ha servido a España. Ahora es portavoz de Exteriores y secretario internacional del PP, un afiliado de base durante muchos años. Por eso sé lo que piensan. Soy el que tiene ganas de renovar el partido de arriba abajo y quien reunirá al resto de candidatos cuando acabe esto.
¿Le fastidia que parezca que esta campaña es cosa de tres?
No me fastidia. En el fondo es un proceso nuevo incluso para los que informan, pero aquí el veredicto lo darán los afiliados, no los que separan entre tres, cuatro o cinco candidatos. Es verdad que yo partía con desventaja mediática. El grado de conocimiento de Soraya, Pablo o Dolores es infinitamente superior al mío. Pero los afiliados tienen muy claro dónde tienen que tener su radar, y eso no lo miden las encuestas. Yo sí estoy en el radar de los afiliados y si les preguntasen a ellos, que es lo que haremos el 5 de julio, habrá sorpresas.
¿Ha recibido presiones para retirar su candidatura?
No, de nadie. Hablo con todos.
¿Cree que los militantes pueden recibir presiones para teledirigir su voto?
Yo no creo que el afiliado esté recibiendo presiones, lo que recibe es mucha información.
¿Va a seguir luchando para que todos los afiliados puedan votar en estas primarias?
Uno plantea las batallas, pero a quien le toca decidir es al Comité Organizador del Congreso. Creo que planteé una cosa muy positiva para el partido, así se ha visto.
¿Qué le ha dicho al COC?
Ya han anticipado que no lo quieren cambiar. Uno propone un debate que considera positivo porque creo sería muy bueno para el partido. He recibido mensajes de gente que no se ha podido inscribir porque estaba su sede cerrada, porque le mandaron la documentación tarde y se acabó el plazo. ¿Qué va a pasar con los que estén al corriente de pago y vayan a votar el día 5 si no se inscribieron antes? Eso no me gusta mucho, la verdad.
Solo el 7% de los militantes del PP se han inscrito a tiempo para poder elegir al futuro presidente del PP. ¿Qué le pasa a su partido para no reconectar con las bases?
Creo que sí hacia falta ese debate de la renovación y lo he ganado. Ahora todo el mundo habla de la renovación del partido, de recuperar nuestros principios, metiendo el humanismo cristiano, el liberalismo y el conservadurismo. Porque han entendido que, o somos un PP más fuerte y volvemos a ser referente en el centro derecha, o esto no tiene sentido.
¿Por qué deberían votarle a usted y no a Santamaría, Cospedal o Casado?
Porque mi propuesta es muy genuina, muy articulada, con medidas de verdad. No digo una frase hueca de renovar o recuperar al afiliado. Yo digo qué voy a hacer para recuperar nuestros principios. No es volver hacia atrás, es todo lo contrario: proyectarse hacia delante con esos principios.
Mis medidas de renovación harían que el PP fuese el más moderno de España: primarias para cada cargo, limitación mandatos para que cada uno puede construir su propia carrera. Se quita la lógica de la confrontación y se apuesta por la cooperación. Es una renovación que permite que entren al partido jóvenes y medio jóvenes y gente más mayor. No es aunar renovación de caras ni solo de juventud. Represento a todo el que tenga algo que aportar a este proyecto. Eso es abrir el partido a la sociedad: que el talento vuelva a entrar y que los jóvenes, al haber esa renovación tan grande, forme parte del proyecto.
He acertado en construir un debate positivo. Lo he visto en las sedes, donde hay gente que se levanta y me dice: te voy a votar a ti, Joserra.
¿Está el PP huérfano de ideas?
Sostener la acción del Gobierno nos dejó huérfanos de ideas. Necesitamos un rearme muy serio y muy transparente o no volveremos a ser el PP. Y si no volvemos a ser el PP, nos sale un pequeño competidor mas molón que dice que son centroderecha aunque una noche se acostaron siendo sociodemócratas y se levantaron liberales.
El PP tiene el deber de ser la gran referencia del centroderecha para toda la gente que piensa como nosotros y que podemos representar.
¿Cree que podría ganarle en las urnas a Albert Rivera?
Albert Rivera no sería mi adversario, sería Pedro Sánchez.
¿Es posible entonces recuperar al votante que se fue a Vox o a Cs?
Sí, porque Ciudadanos es poco creíble: votan más con la izquierda que con nosotros. Y Vox nunca ha estado dentro de las instituciones.
¿Qué es lo que mas le ha molestado del resto de candidatos en esta campaña?
Nada. Uno tiene que aceptar con humildad cuál es la posición de cada uno. Estoy muy contento con este proceso porque al final queda el candidato y su propuesta, y como candidato y propuesta soy la gran relevación y la propuesta que más pesa. No tengo nada que reprocharles.
¿Con quién se siente más representado de los tres?
Los tres son muy PP. Somos muy PP. No veo ninguna diferencia profunda en los planteamientos. Todo el mundo habla de humanismo cristiano.
¿Ha echado de menos un debate a seis?
Sí lo he echado de menos, y creo que no hemos sabido aprovechar la oportunidad histórica que la sociedad española nos reclamaba. Tanto para las inscripciones y abrir el proceso a todos los militantes como en el debate. Pero estoy dispuesto a debatir con Margallo, que es el único que ha aceptado.
¿Cree que hay parálisis en Génova?
Aquí había una acción de Gobierno y el partido ha tenido que estar a la altura. Nosotros hicimos muchísimas cosas. El partido también ha cambiado muchísimo. Cuando entré en 2012 había unos vicesecretarios generales y hoy hay otros. Se renovó la imagen, el discurso y las políticas.
¿Qué hubiera hecho con Cataluña si hubiera formado parte del Gobierno de Mariano Rajoy?
A toro pasado todos somos unos toreros de salón fabulosos. Ni PSOE ni Cs querían apoyarle, y eso delimitaba mucho. Rajoy, con acierto, prefirió no dejar solo al PP sosteniendo al 155, previendo algo que luego pasó: que Cs lo utilizó y fue muy desleal. El voto útil en Cataluña no sirvió para nada. Inés Arrimadas ha estado callada durante muchos meses, demasiados. Un silencio que va a tener que explicar.
La ley es lo único que nos hace a todos iguales. Dentro de la ley se puede hablar, pero fuera de ella hay que tener mucha firmeza. Creo que no se utilizaron todos los recursos para implementar bien el 155. Yo propongo recentralizar la sanidad y la educación respetando las diferencias culturales, pero acabando con el chantaje del lenguaje políticamente correcto. En TV3, esa propaganda tan nociva, habría que haber metido más cordura con profesionales independientes y no con incendiarios.
¿Por qué la gente siente vergüenza de ser del PP?
La sociedad ha admitido el lenguaje del adversario sobre el PP. A todos nos han dicho corruptos. Pero el afiliado del PP es una persona muy orgullosa del PP y yo estoy muy orgulloso de ser del PP. Ahora solo quiero darle buenas noticias a nuestros afiliados con un proyecto renovado para servir a España.
¿Cuál sería su primera medida como presidente del PP?
Invitar a almorzar a los demás candidatos. El día 5 es mi cumpleaños y el 6 les voy a invitar a comer a todos.
¿Cree que se debería depurar el censo electoral?
Lo bueno de este proceso de primarias es que hemos entrado en un proceso de transparencia. El debate del censo electoral es un falso debate porque para dejar de ser afiliado debes acercarte a la sede y decir que no quieres ser más del PP. Y en España muchas veces la gente no dice no quiero. El censo va a seguir siendo muy similar.
¿A quien beneficia mas esta baja participación?
Nos perjudica a todos.
¿Sería un fraude que el candidato más votado en la primera votación no gane el congreso?
Sí. Tiene que ganar. Con que saque un voto más me vale. Los compromisarios no pueden no respetar lo que salga de este proceso. Si no, ¿para qué tenemos afiliados? Es una oportunidad única para que los afiliados elijan qué PP quieren.
¿Cree que podrá unirse de nuevo el PP en torno a la figura del próximo presidente?
Es obligatorio. Todos los que hemos dado el paso adelante amamos el proyecto del PP, hemos dedicado al partido mucho tiempo que hemos robado a los nuestros. Debemos hacerlo por el proyecto porque creemos que es lo mejor para servir a la sociedad.
¿Se ve integrado en otar candidatura?
El 5 de julio celebro mi cumpleaños. Llego hasta el final.