La ministra de Justicia, Dolores Delgado, se refirió al actual ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, como "un maricón". En una comida con Baltasar Garzón y el Villarejo se refería de esta manera homófoba a su compañero en el Ejecutivo, delante del excomisario, mostrando una confianza muy alejada de la falta de trato que dijo inicialmente que tenía.
El lunes la ministra admitió, tras haberlo negado previamente, que había coincidido con José Manuel Villarejo hasta en tres ocasiones.
La comida fue en el restaurante Rianxo, en octubre de 2009. Celebraban una medalla concedida a Villarejo por el Ministerio de Interior. Ya el lunes se publicaron conversaciones de la comida que revelaban la estrecha relación de ambos.
Allí tuvo lugar la conversación distendida, llena de chascarillos, bromas y risotadas, en la que había mandos judiciales (Fernández Chico, Gabriel Fuentes, Pedro Díaz Pintado) junto a Enrique García Castaño, imputado en el 'caso Tándem' y miembros de la cúpula policial, según desvela Moncloa.com. Delgado consiguió hablar de Marlaska tras varios intentos, justo después de que Villarejo declarase su amistad "incondicional" a Garzón.
Delgado: ¿Puedo contar lo de este?
Garzón: Sí.
Delgado: Un maricón.
Villarejo: ¿Quién es maricón? ¿Quién?
Delgado: Marlaska
Garzón: Es una tontería, pero te demuestra dónde está cada uno.
En otro momento de la conversación, con el alcohol ya en la mesa, hablan de los gustos de cada uno.
Villarejo: No me gustan las muñecas hinchables.
Delgado: A mi me pasa lo mismo, a mi los tíos me gustan igual, tontitos nada. (…) Ha venido un tío a la Audiencia monísimo, para que lo vamos a negar, parece George Clooney, pero le pasa lo mismo, es una nenaza.
De los tres encuentros con Villarejo, uno de ellos se produjo hace sólo 15 meses, según informó ayer La Ser. En este, Delgado se reunió con el director del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (Citco) para planear la lucha contra el yihadismo local.
En el momento en el que se produjo, se estaba llevando a cabo el proceso de extradición a Guatemala del naviero español Angel Pérez-Maura. La semana pasada Justicia desmintió una reunión de ambos para que el excomisario mediara, tal y como investiga la Audiencia Nacional por un apunte de Villarejo.
Durante la comida, con la mesa hablando de mujeres, Delgado dice que prefiere "un tribunal de hombres".
Delgado: Mira, yo te voy a decir una cosa, a mi que me den un tribunal de hombres, de tías no quiero. Y no me llevo mal con las tías, pero de tíos, sé perfectamente por dónde van. Y cada gesto, cada cosa… por dónde va la historia.
Villarejo: Je, je.. simple como el mecanismo de un chupete.
Durante otro momento del almuerzo, la ahora ministra habla con el director operativo de la Policía sobre la igualdad de género.
Fernández Chico: Estarás conmigo en que no hay igualdad entre el hombre y la mujer.
Delgado: No, no la hay. Tenemos una ventaja, indiscutible. Mira, ya sé por dónde vas.
García Castaño: Pero si somos iguales.
Delgado: Soy transparente.
García Castaño: ¿Cómo?, tenemos todos lo mismo.
En un comunicado la ministra negó el lunes una posible dimisión tras pedir Ciudadanos que dé explicaciones en el Congreso y anunciar el PP su reprobación. Justicia acusó a Villarejo: "Se encuentra en prisión provisional como presunto autor de delitos muy graves. Su estrategia procesal es atacar al Estado y sus instituciones. Primero cargó contra la Jefatura del Estado con grabaciones relacionadas con el rey emérito. Ahora ataca al Ejecutivo en la persona de la ministra de Justicia".