El candidato a la alcaldía de Barcelona y ex primer ministro francés, Manuel Valls, se ha convertido en el principal azote del emergente partido político Vox, con Santiago Abascal al frente.
Cuando todavía se cierran los últimos flecos para la formación de Gobierno en Andalucía, donde los 12 escaños de Vox serán cruciales, el político próximo a Ciudadanos se está encargando de "desenmascarar" al partido de extrema derecha en las redes sociales.
Valls ha criticado duramente uno de los últimos tuits de la formación de Abascal sobre el rescate de 307 migrantes por parte del barco Open Arms en el Mediterráneo y que llegarán a Algeciras el próximo 28 de diciembre, según ha autorizado el Gobierno. Sobre éste, Vox publicaba: "Pedro Sánchez ha permitido, tras recibir órdenes de su amo Soros, que el barco negrero Open Arms traiga a España 307 inmigrantes ilegales. Santi Abascal, presidente de Vox, tiene claro que es un irresponsable en la protección de nuestras fronteras".
El partido se sumaba así a los mensajes que está difundiendo estos días el primer ministro italiano, Matteo Salvini, que se niega en rotundo a abrir sus puertos para recibir a migrantes rescatados en el Mediterráneo porque considera que las ONG de rescate colaboran con las mafias que trafican con personas.
Valls ha afeado que Vox acoja los mensajes antisemitas y racistas de la extrema derecha que también crece en Europa: "'Su amo Soros'...'barco negrero'...en pocas palabras, y ahora en España, la teoría de la conspiración y las tesis antisemitas y racistas de toda la extrema derecha en Europa", afirmaba Valls.
Similitudes con Orbán en Hungría
Esa "extrema derecha europea" a la que se refiere el candidato a la alcaldía de Barcelona está representada por Le Pen en Francia, Salvini en Italia y, sobre todo, por Viktor Orbán en Hungría.
De hecho, las bases ideológicas del partido de Abascal son muy similares a la democracia cristiana iliberal del líder húngaro al que el presidente de Vox ha mostrado públicamente su admiración.
Esas bases ideológicas del partido de Orbán se resumen en una visión colectiva en lugar de individualista de la sociedad, el nacionalismo, la antiinmigración y la acogida del modelo tradicional católico de familia, considerando indecente cualquier otro modelo apartado de éste. Los resume muy bien este miércoles Miguel Ángel Quintana, profesor de Ética de la Universidad Europea Miguel de Cervantes, en su tribuna La nueva derecha, Hungría y nosotros, publicada en EL ESPAÑOL.
Igual que Valls, el catedrático destaca los mensajes repetidos de la extrema derecha en toda Europa (a los que también se ha enganchado Vox) que hablan de conspiraciones lideradas por el multimillonario húngaro de origen judío George Soros, próximo a Obama y volcado con colectivos LGTB, entre otras muchas causas. El empresario también apoya a través de su asociación Open Society Foundation causas relacionadas con la ayuda a los migrantes del Mediterráneo, algo que no perdonan estos partidos y de ahí, quizá, que le vean como la 'mano negra' o el instigador de la izquierda europea.