"Están creando su propia guardia de corps". Todas las fuentes consultadas por EL ESPAÑOL interpretan de la misma manera la noticia de que el departamento de Presidencia de la Generalidad catalana se dispone a crear un equipo específico de Mossos d'Esquadra, oficialmente bautizado como Área de Seguridad Institucional, cuyo objetivo será la protección del presidente, de la consejera de Presidencia Elsa Artadi y de los expresidentes autonómicos. Entre ellos, Carles Puigdemont.
La creación de la llamada Área de Seguridad Institucional se enmarca, según la información original publicada por el digital El Nacional, en la remodelación del departamento de Presidencia aprobada este martes por el Consejo Ejecutivo del Gobierno catalán. Los mossos escogidos para formar parte del grupo saldrán del servicio de escolta del presidente y se encargarán también de la seguridad del Palacio de la Generalidad.
La justificación oficial para la creación de este nuevo cuerpo es la de proteger a los altos cargos del Gobierno de posibles atentados terroristas. El modelo para su creación ha sido el equipo de seguridad de Moncloa, muy similar en estructura y funciones a los equipos de protección del presidente y su familia existentes en Francia, Inglaterra, Estados Unidos y otros países.
Sospechas de traición entre los Mossos
"Una cosa es lo que explican oficialmente, y otra muy diferente sus verdaderos objetivos. Pretenden controlar y evitar posibles escuchas y pinchazos telefónicos, hacer contravigilancias, blindarse ante filtraciones… En mi opinión, es una medida relacionada con el procés y con los futuros pasos que se den en este sentido", explica una fuente cercana a la Consejería de Interior del Gobierno catalán. "No creo que haya una especial preocupación por posibles atentados terroristas, como deja intuir la noticia. Eso es más bien la excusa para la creación de este cuerpo, pero no su verdadero objetivo", añade.
Pero, ¿por qué ahora, a las puertas del juicio a los líderes del procés? "El sumario demuestra que el procés estaba agujereado como un queso. Hay escuchas en el sumario y seguimientos por todos lados. Por parte de la Guardia Civil, por parte del CNI…", afirma la misma fuente. "Es más: la sospecha en el Gobierno de Torra es que no hay nada más 'agujereado' y 'cómplice de Madrid' que los Mossos d'Esquadra. Y por eso entiendo que escogerán fieles y que los sacarán del paraguas administrativo de la Consejería de Interior. Imagino que no darán cuenta de sus actividades a sus superiores, ni compartirán sistemas informáticos o redes. Será una especie de Servicio Secreto como el que tienen los presidentes de los Estados Unidos".
Inquietud entre los partidos catalanes
Que la iniciativa haya surgido de Presidencia, y no de la Consejería de Interior, ha llamado la atención entre los grupos de la Cámara catalana. "Es significativo que la iniciativa sea de Presidencia. Imaginamos que será un lugar donde colocar a afines a la causa", dicen en Ciudadanos. "No tiene nada que ver con nosotros. Eso es una iniciativa de la vieja Convergencia", afirman en ERC, quitándose de encima cualquier responsabilidad al respecto.
En el PP, la noticia ha provocado inquietud: "Es difícil saber todavía con certeza qué es lo que pretenden. Estamos trabajando en ello. Pensando mal, es una Guardia Republicana, pero no podemos asegurarlo. La otra idea es que pretendan dar cobertura a la seguridad de Carles Puigdemont en Bélgica, que ahora será pagada, oficial y legalmente, desde aquí". Otros miembros del partido, sin embargo, prefieren verlo, simplemente, como una estructura de Estado más. "No le veo nada especialmente rebuscado. Es una nueva estructura de Estado. En la práctica, es bananerismo presidencial con ínfulas por parte de alguien que tiene respiración asistida de España".