Villamalur era un pueblo tranquilo de 63 habitantes asentado en la cima de un monte de la Sierra de Espadán, en Castellón. Dejó de serlo a mediados de este mes, cuando se pidió la inscripción masiva -para el tamaño del pueblo- de 46 personas en cuatro viviendas de la localidad, sin causas económicas o demográficas aparentes que lo justificasen.
El hecho no hubiera pasado inadvertido en ningún caso, pero menos aún por el momento elegido -a cuatro meses de las elecciones- y por la identidad de varios de los nuevos vecinos, algunos de ellos militantes del PSOE, tal y como ha podido confirmar EL ESPAÑOL en fuentes municipales. El municipio está gobernado ahora por el PP.
Al amparo de la normativa vigente, que prevé la existencia de empadronamientos irregulares con el fin influir electoralmente, el Ayuntamiento de Villamalur ha denunciado ya el caso ante la Fiscalía Provincial de Castellón.
"Apreciada la existencia de posibles indicios de irregularidad en solicitudes de alta de inscripción en el padrón municipal de habitantes de esta población (hasta la fecha, 46 solicitudes de alta), de un censo electoral de 58 personas, lo que supone un incremento de más del 79%, se pone en conocimiento del Ministerio Fiscal tales hechos, dado que su posible inscripción podría afectar en las cifras de electores de próximas convocatoria electorales", señala el escrito, que fue registrado el pasado viernes, 25 de enero.
Dos referentes del PSOE en la comarca
El paso dado por el consistorio y la consiguiente suspensión del proceso de inscripción ha llevado a los solicitantes de empadronamiento a protestar ante lo que entienden es un intento de evitar que puedan votar en las elecciones de mayo. "Y con razón", responden las fuentes consultadas en Villamalur, porque entre los aspirantes a nuevos vecinos están, entre otros, una persona de la total confianza de Enrique Navarro -histórico socialista de la provincia y ex alcalde de la vecina Onda- o Juan Miguel Salvador, que aunque nacido en Villamalur reside en Onda, donde también fue alcalde con el PSOE.
En declaraciones al diario Levante, una de las 46 personas que aspiran a ser empadronadas de golpe, asegura que todos son descendientes o tienen vínculos con el pueblo, y admite que entre sus intenciones está cambiar la dinámica actual: "Queremos poner a Villamalur en el mapa, que sea un referente de la Sierra de Espadán, de turismo, de naturaleza y mejorar la calidad de vida del pueblo (...) Por todo ello hemos decidido que vamos a cambiar esta situación políticamente".
Si había alguna duda entre los habitantes del pueblo, estas manifestaciones no sólo las han disipado, sino que han puesto a muchos en pie de guerra: "Intentan asaltar la alcaldía haciendo trampas". Se da la circunstancia de que el PP gobierna ininterrumpidamente en la localidad desde 1991, va ya para 28 años.
Juan Bautista Gimeno, el alcalde, se limita a explicar que se han tomado las decisiones oportunas para que todo se haga de acuerdo a la ley, y alega que las solicitudes son muy recientes, de los días 16 y 23 de enero. Mientras, los solicitantes de empadronamiento urgen a una solución rápida: si el padrón no está actualizado este viernes, día 1, habrán perdido al menos cuatro años, el tiempo que dura una legislatura.