Quim Torra y Carles Puigdemont han terminado ofreciendo en un hotel de Bruselas la conferencia que pretendían que tuviera lugar en el Parlamento Europeo y que su presidente, Antonio Tajani, prohibió por razones de "seguridad" y "orden público". Ha sido ante poco más de 200 personas, en un aforo repleto de afines.
Torra ha comenzado su intervención precisamente por ese punto: "La lucha contra el autoritarismo llega dentro de las instituciones de la UE. Tajani ha impedido los derechos de reunión y de información. Ha tomado una decisión ideológica cuando debe ser el presidente de todos los europeos, no sólo de la derecha más radical".
Se ha referido Torra a continuación al visto bueno de Tajani a una ponencia de Vox en la Eurocámara el próximo 6 de marzo titulada 'Cataluña, una región española'. Para el president, "las prácticas de Tajani parecen guiadas por la voluntad de boicot a Cataluña".
Nuevamente, ha tratado de vender en el extranjero que los políticos sentados en el banquillo del Tribunal Supremo en el juicio al 'procés' lo están "por sus ideas". Entiende Torra que "los meses que vienen son una oportunidad para que la comunidad internacional vea la verdadera cara del Estado español, que ataca los valores y principios fundacionales de la UE", llegando a señalar que lo que se juzga es "un movimiento democrático".
Torra: "Incluso con un gobierno socialista..."
Su retahíla ha sido la habitual, atacando a la separación de poderes y centrando el tiro en la Justicia: "España vive en un círculo vicioso autoritario. Es una situación muy complicada, pero nunca nos rendiremos. Nunca. (...) Nuestros compañeros no tendrán un juicio justo por la simple razón de que, según la legislación española, la unidad de España está por encima de la democracia, los derechos humanos, por encima de todo".
Torra también ha tenido para el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, preguntándose "cómo pueden los catalanes confiar en un estado que, incluso con un gobierno socialista, no duda atacar derechos y abandonar el diálogo porque no pueden aceptar un relator independiente o hablar de autodeterminación".
El "exiliado" Puigdemont -como se ha presentado-, también con un discurso ya familiar, se ha referido a España en los mismos términos, señalando que "la unidad de España no merece estas vulneraciones de los derechos humanos".
Al igual que Torra, Puigdemont ha criticado el veto de Tajani: "Soy un ciudadano libre europeo que he sido invitado a varios parlamentos y nunca ha sido una amenaza para el orden público. La UE no puede apoyar acciones demofóbicas como la de Tajani sobre Cataluña".