Se marchó de la sala del Tribunal Supremo saludando y dando la mano a cada uno de los encausados en el juicio del procés, salvo a Santi Vila, después de declarar en calidad de testigo a lo largo de 15 minutos. Gabriel Rufián, portavoz de ERC en el Congreso, ha acudido en la mañana de este jueves para someterse a las preguntas de la acusación popular.
Antes de contestar a las cuestiones planteadas por Vox, el portavoz de ERC en el Congreso ha vuelto a subrayar que le parece "una vergüenza que vosotros estéis aquí como partido xenófobo y racista. Contestaré al señor Ortega Smith porque me lo ha pedido la defensa, porque entiendo que así ayudo a mis compañeros, aunque me parece una vergüenza".
El juez Manuel Marchena, un día más armado de paciencia, le ha llamado al orden y le ha advertido de que no volviera a hacer ese tipo de declaraciones en la sala del Tribunal Supremo donde se juzga el procés.
Ante la pregunta de Vox sobre si sabía que los miembros de la comitiva judicial habían salido por un edificio contiguo el 20-S Rufían contestó: "No. Es una fake news como que el castellano está perseguido en Cataluña. A mí me chirría que se diga que fue una rebelión".
El portavoz de ERC en el Congreso, que acudió ese día a la protesta tras asistir a la sesión de control al Gobierno en el Congreso, ha asegurado que en el 20-S "se hacían cánticos pacíficos en catalán y parlamentos", había "muchísima gente" y también mossos d'esquadra. Tras intentar sin éxito entrar al edificio -ha continuado el testigo- decidieron abandonar por un momento la concentración para salir a comer algo.
"Me chirría que se dijera que aquello era una rebelión o un tumulto peligroso, porque yo fui a comer, yo fui a merendar y yo creo que en una revolución a merendar va poca gente", ha señalado ante la advertencia del presidente del tribunal, Manuel Marchena, de que "no valore" al estar "como testigo en una sala de justicia".
A la pregunta sobre las líneas generales del separatismo para celebrar el referéndum y llegar al 1-O, Rufián ha concluido: "No tengo ni pajolera idea de cuál era la hoja de ruta".