Pablo Casado dice que es necesario "aglutinar el voto" de los tres partidos que "lograron que Pedro Sánchez anticipara las elecciones tras la movilización de la plaza de Colón", porque aquello fue "la España de los balcones bajando a la calle a defenderse". Y dice Santiago Abascal que el PP es "la derecha blandita" y Ciudadanos "una veleta" que cambia según sopla el viento.
Sin embargo, y a pesar de las reticencias del líder de Vox respecto a sus posibles aliados, dos de cada tres de sus votantes quieren ir a las elecciones generales en coalición con el Partido Popular. También es una mayoría de simpatizantes populares la que opta por la aventura conjunta, si bien con menos entusiasmo.
Según la encuesta que publica EL ESPAÑOL, elaborada por SocioMétrica, un 62,5% de los electores que van a optar por la papeleta de Vox querría ver en ellas también a los candidatos del PP y asegurar así una fuerza mayor en el Congreso.
El objetivo principal es no perder los restos que dejaría al Ley d'Hont en las provincias pequeñas, tanto es así que el 36,5% de los votantes de Abascal opta por juntar fuerzas con los populares en toda España. Y el 26% querría la coalición únicamente en las circunscripciones que otorgan menos escaños. Sólo el 21,9% prefiere ir en solitario a las urnas.
En el caso de los seguidores del PP, hasta el 47,4% quiere algún tipo de alianza con el partido que ha nacido con fuerza a su derecha. El 27,8% preferiría que fuese sólo en las provincias pequeñas, pero uno de cada cinco (el 19,6%) cree que sería deseable que la coalición se diese en todas las circunscripciones. Por el contrario, hasta el 38,8% desea que Casado no llegue a acuerdos con Abascal.
Y es que el trasvase de votos que está nutriendo a Vox viene esencialmente de los populares. Ya sea de manera directa o previo paso por Ciudadanos. Hoy en día, sólo el 44% de quienes votaron al PP de Mariano Rajoy en 2016 confiesa que repetirá seguro en estas elecciones del 28-A. Un 22,2% se prevé elegir la papeleta de Ciudadanos y un 22,5% optará por la de Vox.
La hermandad de los votantes del ala conservadora del tablero político queda así claramente reflejada. Ya que los desertores de Ciudadanos están yéndose más a Vox que regresando al PP: los de Abascal reciben un 12% de los electores que votaron a Rivera en 2016, que previamente en su mayoría habían sido electores populares, y Casado sólo recupera un 8% de los que abandonan al partido naranja.
La unión haría la fuerza, según el sondeo de este periódico, PP y Vox suman el 29,6% de la intención de voto, que está muy cerca del 33,03% con el que Rajoy ganó en 2016 y que es más que el 27,6% que alcanzaría el PSOE de Pedro Sánchez si las elecciones fuesen ahora. Con el reparto de escaños de la ley electoral, la prima de ganador, sobre todo en esas circunscripciones pequeñas, le podría dar una victoria holgada a esta coalición... que piden dos tercios de los votantes de Abascal.
Se han realizado 1.600 entrevistas del 5 al 8 de marzo de 2019, a ciudadanos con derecho a voto en cualquier municipio de España, a través de teléfono fijo (600), móvil (400) y panel online (600). La muestra está equilibrada en tres fases: autoponderación por provincia y tamaño de hábitat, equilibraje por sexo, edad y situación laboral, y una última ponderación por recuerdo de voto. El cálculo de escaños es por suma de escaños D`Hondt a una proyección provincial. El procedimiento está automatizado con macros SPSS, Barbwin, y Segmentanet e incluye controles de calidad internos y normativa CCI/ESOMAR y LOPD. Sociometrica es miembro de AEDEMO y ANEIMO.