Un error de cálculo básico. En el Partido Popular ha generado cierta incredulidad la propuesta de Albert Rivera de tener un careo televisivo con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Sobre todo, dado el escenario: la lucha por la influencia en el centro derecha sólo se basa en la demoscopia y, con los datos en la mano, Ciudadanos es la cuarta fuerza política en el Congreso. “Nos parece ridículo, pura pose”, afirman a este diario fuentes de la dirección nacional popular.
Corría el mediodía cuando los naranjas exteriorizaron su petición. Reaccionaban así al llamamiento de Casado de tener su cara a cara con Sánchez. Pero su decisión únicamente se justificaba con las encuestas actuales, con unos datos volátiles que a veces les sitúan a muy poca distancia del PP, en algunas ocasiones les colocan por encima o, en otras, varios escaños por detrás que se antojan difíciles de salvar.
“Hicieron algo similar al principio con la presidencia de la Junta de Andalucía. Las urnas y el número de escaños son el único rasero posible. Ellos tienen 32 escaños, nosotros 134-137. Es una pura ridiculez”, reflejan desde el equipo de Casado.
"Un error más de Rivera"
El malestar es generalizado. Incluso el propio presidente popular hizo referencia este lunes. “El PP tiene 134 escaños y Ciudadanos tiene 32. Lo demás es hablar de encuestas y las últimas que hablamos fueron las de 2016 que parecía que iba a haber empate y al final hubo una diferencia de 102 escaños”. “Lo lógico es que quien debata en un cara a cara sea el presidente del Gobierno, que en este caso tiene 84 escaños, y el líder de la oposición, que tiene 50 más”.
Pero de puertas para adentro la crítica va más allá que por los números. “Es un error inmenso una vez que ellos [Ciudadanos] por ideología han decidido abandonar su posición puente e intentar pugnar por el bloque de centro derecha. Es un error. Uno más”, relata un diputado popular.
“Sólo hay un candidato posible para el Gobierno y es Casado. Porque Rivera no puede asumir el liderazgo en ningún caso: es la cuarta fuerza política en el Congreso, no gobiernan en ninguna comunidad autónoma ni en ningún ayuntamiento relevante. Están totalmente equivocados”, azuzan desde la bancada del PP.
"Han llegado tarde a su propia película"
Al final, desde Génova lamentan la falta de visión de los de Rivera y la fragmentación del voto de su bloque. “Su jugada era ir a la izquierda para aumentar el suelo electoral y ahora quieren disputarle al PP el centro derecha, sin ser conscientes de que cuando empecemos a roturar el campo, recuperaremos posiciones”, comentan las fuentes.
“Se equivocaron al inicio de la campaña y han llegado tarde a su propia película. Acentúan la ventaja al PSOE, ¿no ven que le van a dar dos veces prime time a Sánchez, más prime time?”, indican.
“Deja en paz a Pablo y que él se pelee con Pedro. Si sabe que lo va a perder y renunciará. Es un error más, como cuando dijeron que no querían el voto de la izquierda”. Porque “la política es convencer con tu ideario, no seleccionar votantes válidos”.