El porcentaje total de votantes indecisos para estas elecciones del 28-A es del 23,30%. Pero ese dato se limita únicamente al voto válido, es decir, a los que responden que su decisión oscila entre dos formaciones y sí tienen un intención confesada de ir a votar. Si a ellos les añadimos los presuntos abstencionistas y quienes no saben aún o no contestan, la cifra de quienes pueden modificar el panorama electoral ronda el 40%.
Y es que con el voto tan dividido tras el fin del bipartidismo -ahora son cinco las formaciones nacionales con capacidad de sumar para formar mayorías-, la decantación definitiva a un lado o a otro de los indecisos puede cambiar, y mucho, la formación de mayorías. La duda mayor entre los votantes que quieren ir a las urnas sigue estando entre PP y Ciudadanos -con un 6,1% del electorado oscilando entre ambos-, lo cual explicaría la batalla dialéctica lanzada entre ambos partidos.
Lo que está claro es que la victoria electoral de Pedro Sánchez parece ya descontada por todos los sondeos. Y en eso coincide el tracking elaborado por SocioMétrica para EL ESPAÑOL. Como se observa en el gráfico, todos los partidos se solapan en sus porcentajes máximos y mínimos menos el PSOE. Pero, ¿cuál es su techo electoral?
A nivel nacional, el PSOE podría llegar a alcanzar los 146 escaños si las elecciones generales se celebraran hoy, siempre que todos los electores que lo tienen entre sus posibilidades acabaran optando por Sánchez. Se haría así el candidato socialista con una gran victoria sumando un 34,5% de los apoyos.
Pero, ¿cuál es el suelo del Partido Socialista? En el improbable caso de que finalmente no le votaran ninguno de los votantes que en la actualidad oscilan entre Sánchez y otro líder como preferido para ser presidente del Gobierno, el candidato a permanecer en Moncloa se encontraría en un magro 25,3% del voto válido y nada más que 105 diputados. Una subida sensible, sin duda, desde los actuales 84 escaños, pero muy lejos de las actuales expectativas.
Estas cuentas nacen del porcentaje de votantes totales que hoy están dudando entre el PSOE y Unidas Podemos (5,3%), entre PSOE y Ciudadanos (2,4%), entre PSOE y PP (0,9%), con otros partidos (0,6%) o pensando en votar al PSOE o abstenerse (0,3%).
En todo caso, es estadísticamente imposible que todos los indecisos se decanten de un solo lado -a favor o en contra-, pero será de esos nichos de dudosos de los que tirarán en las próximas semanas los mensajes de los partidos. Aplicando la corrección de recuerdo de voto y las tendencias marcadas, SocioMétrica establece un punto más probable de estimación de voto, que es el que refleja el cuadro reproducido más arriba: aunque oscile entre 105 y 146 escaños, este tracking electoral calcula la estimación de voto para el PSOE en 127.
Los indecisos de Vox
Para el partido de Santiago Abascal todo resultado será interpretado como una victoria. Pasarán de ser una formación extraparlamentaria a entrar en el Congreso con una fuerza considerable. De hecho, su horquilla más baja no anda lejos de los 32 escaños que tanto le costó lograr a Ciudadanos en 2016. Así, si ninguno de los electores que dudan entre Vox y otro partido finalmente eligiera a los de Abascal, estos se quedarían en un 8,8% del apoyo, que se traduciría en 27 diputados.
Pero el techo del partido que ocupa el extremo derecho del tablero electoral es mucho más alto: Vox podría alcanzar los 44 escaños y un porcentaje de voto del 14,6% si todos los entrevistados que aún están indecisos optaran por la papeleta verde. Aun así, el punto más probable que le asigna este tracking para EL ESPAÑOL es de 33 diputados, con un 11,2% de las papeletas.
Es muy reseñable que el voto por Abascal está ya bastante decantado, según los porcentajes de indecisos entre los encuestados. Y es que, a pesar del repunte que indica este tracking, sólo un 1,7% de los electores permanece en la duda de si ir a Vox o decantarse por el PP de Pablo Casado. Y únicamente un 0,9% oscila entre Vox y Cs.
La gran horquilla del PP
A la vista de los datos en bruto, podría llamar la atención la enorme horquilla que se le abre al Partido popular entre su mejor escenario posible -99 diputados con un apoyo del 24%- y el peor -61 escaños y un 15,3%-. Tiene sentido, teniendo en cuenta ese alto porcentaje del 6,1% ya reseñado de posibles votantes populares que oscilan entre PP y Cs, ese 1,7% que podría optar por Vox y el 0,9% que tienen al PSOE como opción. Su resultado más probable es de 75 diputados (19,1%).
Finalmente, Pablo Iglesias podría verse muy perjudicado si Pedro Sánchez logra atraerse toda la bolsa de 5,3% de indecisos entre ambos a su redil. O si perdiera el 1,1% de votantes que tienen otras opciones no mayoritarias en mente. El techo de Unidas Podemos está en 52 escaños (16,8%) y su suelo en 31 diputados (10,4%). En el escenario más probable no habría cambios en diputados pese a lograr el 13% de los votos.
A Albert Rivera, igualmente, le restaría mucha fuerza que Casado ganara toda su batalla en común (6,1%) o que lo hiciera Sánchez, pues todavía un 2,4% de los votantes dudan entre Ciudadanos y PSOE. Esos dos flancos abiertos podrían explicar la presunta confusión ne los mensajes de la que se acusa al partido naranja, que por ocupar el centro tiene que atender fugas a ambos lados de su electorado. De hecho, no lo olvidemos, hay un 0,9% de indecisos que pueden escapársele a Vox.
Análisis diario con un acumulado de 1.800 encuestas, actualizadas cada día a 350 nuevas, eliminando las 350 más antiguas. Telefonía fija y móvil con marcación aleatoria de CATI Gandía Inegra ©. Autoponderación por provincia y posterior equilibraje por sexo y edad. Para el cálculo de voto, se hace una postponderación por recuerdo de voto, y un ajuste de indecisos según diferentes hipótesis de abstención. La horquilla de escaños es la suma de horquillas provinciales, aplicando d’Hondt a un error del 10% por partido. El error teórico resultante es < +/- 3% para datos y +/- 2 para escaños. Las encuestas están automatizadas con macros en R, e incluyen controles de calidad internos y normativa CCI/ESOMAR y LOPD. Sociometrica es miembro de AEDEMO y ANEIMO.