"No hay una organización que dice 'matemos a mujeres' por el hecho de ser mujeres, como sí hay organizaciones que dicen 'matemos a infieles' o 'matemos a españoles' por el hecho de serlo. Y las hubo en el País Vasco y aquí en Cataluña". La 'número 1' del PP por Barcelona al Congreso de los Diputados, Cayetana Álvarez de Toledo, ha vuelto a exponer este jueves y de esta forma su punto de vista sobre la violencia de género.
Lo ha hecho a propósito de las críticas, especialmente desde PSOE y Unidas Podemos, tras sus manifestaciones al respecto en el debate a seis organizado por RTVE los primeros días de campaña. Entonces, Álvarez de Toledo cargó contra "la cosa esta del feminismo" del "si no hay un 'sí', es 'no'" en cuanto al consentimiento en las relaciones sexuales. "Una duda... ¿de verdad van diciendo ustedes 'sí', 'sí', 'sí' hasta el final?", preguntó.
La dirigente, en un foro organizado por El Periódico, ha defendido que "la violencia contra las mujeres no es política, sino ideológica". Y ha insistido: "Basta ya de instrumentalizar el dolor de las víctimas y de las mujeres. La violencia de pareja no es un crimen político. No hay una organización de machos que se dediquen a matar a mujeres".
"Tenemos las manos la mar de limpias"
La candidata se ha referido a otra "violencia". En concreto, la ejercida contra su persona y otros compañeros en la Universidad Autónoma de Barcelona: "La violencia siempre es contra los constitucionalistas. ¿Dónde están esas hordas de constitucionalistas que se dedican a boicotear actos? Que quede claro que no hay dos bandos equiparables", ha recalcado.
En defensa del PP y de su líder, Pablo Casado, ha proclamado que su partido "tiene las manos la mar de limpias porque no ha mendigado votos a (Arnaldo) Otegi", en respuesta a la pregunta que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, hizo en el debate de Atresmedia a Casado por las medidas en las que el voto de los 'populares' ha coincidido con el de Bildu.
"Nunca nos hemos sacado una foto como la de (Idoia) Mendia cocinando con Otegi y nunca aceptaríamos ese millón de votos para llegar a Moncloa", ha zanjado.