El promedio de sondeos publicados hasta la fecha vaticina que Vox irrumpirá en el Congreso de los Diputados como quinta fuerza. Pero las encuestas de la calle no dicen eso. Más bien lo contrario. Desde que arrancó la campaña electoral, Vox ha exhibido músculo electoral en casi todos sus mítines. Una capacidad de movilización que no han registrado el resto de formaciones que compiten en la pugna por llegar a La Moncloa.
Toledo, Oviedo, Valladolid, Granada, La Coruña, Las Rozas… En todos las plazas que ha visitado Santiago Abascal durante estos 15 días, Vox ha firmado un llenazo absoluto. Los pabellones se quedaban pequeños para la formación de derecha radical. Ni siquiera la lluvia de Murcia el pasado domingo fue un impedimento para que Vox viviera un nuevo éxito, donde cerca de 2.000 simpatizantes deseosos de escuchar al candidato se tuvieron que conformar con aguardar en las inmediaciones. Dentro se reunían 4.000 personas. Aforo completo.
Si este miércoles las colas en el Palacio de Congresos y Exposiciones (Fibes) de Sevilla para acceder al mitin eran interminables, las imágenes de lleno se volvían a repetir este jueves en Valencia. Allí, en la ciudad del Turia, en la Ciudad de las Artes y las Ciencias, Abascal reivindicaba ante 6.000 fieles que el 28-A sólo existen “dos opciones”: la “continuidad histórica” de España o “el caos de un frente popular que une a comunistas, separatistas y señoritos de Barcelona”.
"Vox ya ha ganado"
Las imágenes del político vasco dándose constantes baños de masas auguran que, más allá de lo que diga la demoscopia, “Vox ya ha ganado”, en palabras del propio Abascal, para quien lo que ocurrió en las pasadas elecciones andaluzas fue solo “el chispazo” de lo que va a pasar este 28 de abril, cuando por fin se abran las urnas.
“Da un poco igual conseguir 9 o 99 escaños, Vox ya ha ganado porque todos los debates vuelven a estar encima de la mesa y nunca más van a poder meterlos dentro del armario", sentenciaba el de Amurrio en su mitin en la ciudad hispalense, en la que el lleno era prácticamente hasta la bandera. “La reconquista ha empezado por el sur”.
Los sociólogos consultados por este periódico, no obstante, piden cautela y señalan que la alta movilización de Vox no se tiene por qué traducir en votos.
Abascal pincha en casa
Sin embargo, Abascal no tuvo tanta suerte en su tierra. Allí pinchó. El día de su cumpleaños, el 14 de abril, viajó a Vitoria para participar en un acto que no consiguió llenar el auditorio habilitado para el mitin: buena parte de las sillas de la sala se quedaron vacías.
Según Abascal, esa escasa afluencia de público se debe a que en País Vasco “es mucho más difícil” atraer a los ciudadanos porque es una región que “durante mucho tiempo se ha perseguido la libertad y se ha acabado con la vida de las personas”.