Inés, la tercera hija de Begoña Villacís, nacerá este viernes. La alcaldable de Ciudadanos salía de cuentas a primeros de junio, pero los médicos la han aconsejado adelantar el parto tres semanas. Será por cesárea, según ha anunciado ella misma inmersa en un remolino de cámaras a orillas de la ermita de San Isidro.
El equipo de la candidata, según confirma un portavoz autorizado a este periódico, ya había diseñado un plan B por si se daba este supuesto.
Villacís no ha solicitado el voto por correo, pero la operación que supone un parto por cesárea le hará perderse al menos parte de la última semana de campaña. “Iré, aunque sea como Rambo en Acorralado”, ha confirmado a preguntas de los periodistas, "estaré de baja los días que haga falta".
“Voy a hacer caso a las indicaciones. No voy a poder aguantar más, que es lo que me hubiese gustado”, ha revelado Villacís. Tal era la marabunta de periodistas que la candidata, engullida por los micrófonos y las cámaras, ha bromeado: “¡A ver si lo vais a adelantar en directo!”.
Flanqueada por Albert Rivera e Ignacio Aguado, Begoña Villacís ha pedido al santo “que todo salga bien”. Fuentes de su entorno especifican que se ausentará “los días que haga falta”, que se “cogerá la baja”, pero que no será “maximalista”: “Si tiene que negociar pactos o acuerdos de investidura, allí estará”.
“Tengo muchas ganas de ver la carita de mi bebé. No lo voy a esconder. Sé que estamos en campaña, pero hay acontecimientos que lo superan todo”, se ha sincerado.
Villacís ha confesado “confiar mucho” en su “equipazo”: “Estaré apoyándoles como sea”. La candidata de Ciudadanos a la alcaldía ha celebrado que Madrid sea una ciudad en la que “no importa el idioma o el lugar de procedencia”: “Cualquiera de los que estamos aquí somos madrileños”.
Al despedirse, ha dicho creer en la victoria, independientemente de lo que digan las encuestas: “Podemos ganar estas elecciones”.