El candidato socialista Augusto Hildago tiene más cerca conservar el cargo de alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, tras haber ganado las elecciones con once de los 29 concejales de la corporación, los suficientes para repetir alianza con Podemos y NC.
De acuerdo con el resultado de las urnas al 98% del escrutinio, el PSOE se ha convertido en primera fuerza política de la mayor ciudad de Canarias, con cuatro ediles más que en 2015, un avance que sigue haciendo posible la reedición del tripartito que ha gobernado los últimos cuatro años la ciudad, pese al hundimiento de Podemos.
La formación morada ha perdido esta noche la mitad de los seis concejales que tenía en una de las ciudades que más satisfacciones electorales le había dado en todo el país en los últimos años.
Pero el tercer socio del gobierno progresista, Nueva Canarias, también ha crecido, al pasar de dos a tres concejales, con lo que la reedición del tripartito seguiría sumando la mayoría absoluta.
Tanto el candidato socialista, Augusto Hidalgo, como el cabeza de lista de NC, Pedro Quevedo, ya se han declarado partidarios esta misma noche de repetir gobierno con los mismos socios.
Falta por conocer la posición de Podemos, cuyo candidato, Javier Dores, solo ha manifestado que los resultados no les satisfacen "para nada", porque su representación se queda en la mitad.
El resto de la corporación estará conformada por siete concejales del PP, que ha perdido tres de sus asientos en el pleno tras una campaña en la que tuvo que cambiar de candidata sobre la marcha por la renuncia de la inicialmente elegida, María Salud Gil.
Tres consejeros consigue por su parte Ciudadanos, que repite representación, y Coalición Canaria logra entrar con dos elides en un Ayuntamiento del que estaba ausente desde hace 16 años.
Sin embargo, esa representación es exactamente la misma que tenía el partido con el que ahora comparte lista, Unidos por Gran Canaria.