Albert Rivera se reunirá con Pedro Sánchez este martes. Será la segunda vez desde que el socialista llegó a La Moncloa. El tono se prevé parecido y el mensaje no variará: "Ni nuestros votos ni nuestra abstención". Así lo ha confirmado el secretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, tras reunirse la Ejecutiva de su partido.
Los liberales insisten en que Sánchez "ya tiene sus socios" y le urgen a formar gobierno "cuanto antes". Una opinión que Rivera lleva sosteniendo desde que se abrieron las urnas de las últimas elecciones generales.
Cuando se les pregunta por la posibilidad de que Sánchez renuncie a pactar con Iglesias y el nacionalismo, los mandatarios de Ciudadanos responden de la misma manera: "Ni nuestros votos ni nuestra abstención".
Según ha explicado Villegas, el encuentro entre Sánchez y Rivera "no arrojará sorpresas": "Cumpliremos con el compromiso que adquirimos con nuestros votantes en campaña". Fue entonces cuando el partido liberal oficializó por unanimidad su veto al secretario general del PSOE.
"Ningún voto de Ciudadanos va a servir por activa ni por pasiva para hacer presidente a Sánchez", ha zanjado Villegas. Moncloa, tal y como informó este periódico, prepara "un hombre nuevo" para las reuniones con Rivera y Casado. Un punto que no altera las convicciones en Alcalá, 253.
El mensaje de Ciudadanos no varía siquiera cuando se pone sobre la mesa la posibilidad de que el desacuerdo de Sánchez con Podemos y el nacionalismo conlleve la celebración de unas nuevas elecciones. "Que cada uno asuma su responsabilidad", sostienen fuentes autorizadas del partido.
"Todas las posibilidades abiertas"
En cuanto a los pactos territoriales, Villegas ha confirmado que el PP sigue siendo su "socio preferente", pero no descarta acuerdos con el PSOE ante la imposibilidad de sumar con los primeros.
En los últimos días, se han enfriado las negociaciones con los conservadores tanto en Murcia como en Castilla y León. En el primero de estos lugares, los socialistas ofrecen la alcaldía de la capital de la región a cambio de la presidencia de la Comunidad. En tierras castellanas, Igea mira hacia Ferraz ante las dudas que le genera el "compromiso regenerador" del PP, que gobierna allí desde hace más de treinta años.
En Aragón, la relación con el PP es buena, pero el PAR prefiere un Ejecutivo de izquierdas. De ahí que Villegas les haya llamado a sentarse a su mesa. En lo que se refiere a la Comunidad de Madrid, la reunión secreta con Vox ya garantiza la presidencia de la Mesa a Ciudadanos. Sobre la capital, el secretario general ha reiterado que no renuncian a que Villacís sea alcaldesa.