Había una cara nueva en el pleno extraordinario del Congreso de esta semana. Discreto, resguardado con una americana marrón y camisa azul, Pablo Hispán, flamante jefe de Gabinete del presidente del PP, Pablo Casado, aparecía en las tribunas de invitados del Hemiciclo. Tan sólo habían pasado unas horas desde que se conociera su nombramiento y él ya se dejaba ver de cara a la rentrée.
Pablo Hispán Iglesias de Ussel (Madrid, 1973) no es un desconocido ni en los entresijos políticos ni mucho menos en Génova. De hecho, ya había ostentado el cargo que ahora vuelve a ocupar justo tras el Congreso Extraordinario del PP que encumbró al ahora presidente del partido.
La relación entre ambos, Pablo y Pablo, viene de lejos. Comparten raíces: son netamente liberales y los dos se criaron bajo la mirada de FAES. Pero mientras Casado se quedó al lado del expresidente Aznar, Hispán se despegó de la fundación. El primero se formó como líder y el segundo comenzó a brillar como asesor en la fontanería política.
"Casado gana en oxígeno"
El que es ya el Iván Redondo popular tiene una relación "muy trabajada" con su nuevo jefe, según comentan fuentes cercanas a Casado. "Pero se le va a ver poco, poquísimo. Menos que a Fernández-Lasquetty [el hasta ahora jefe de Gabinete del presidente, que actualmente es el consejero de Hacienda de la Comunidad de Madrid]".
No es la única diferencia que se aprecia dentro del partido. Dirigentes populares consideran que Hispán tiene un perfil novedoso con respecto al resto del gabinete de Casado. "Es menos FAES, menos ideologizado que Lasquetty. Tiene un perfil técnico, menos político. Eso es bueno". También resaltan su procedencia: la escuela marianista. Hispán trabajó como asesor en la administración de Mariano Rajoy en sus épocas en la Moncloa. "Va a ser mucho mejor. Casado va a ganar en oxígeno", considera un destacado líder próximo al expresidente Rajoy.
"Es más abierto, más centrado", opina un miembro de la dirección del PP. "El perfil se ha moderado". Así, parece que Casado quiere reforzar otras áreas de su equipo para dotarse de un aire más presidencial, de hombre de Estado. La percepción es compartida por diversos diputados populares: "Ahora que estamos gobernando, quiere potenciar su perfil de partido de gobierno. Al final, eso es lo que nos diferencia de Cs".
"Un fontanero de Moncloa"
A Hispán, licenciado en Económicas y Empresariales por la Universidad de Navarra. Universidad y doctor en Historia Contemporánea, se le recuerda en Génova como "un fontanero de Moncloa". Principalmente, por su trabajo con Jorge Moragas. Él era uno de los miembros destacados de su equipo.
También desempeñó diferentes cargos en la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid, de la mano de Lucía Figar y bajo la batuta de Esperanza Aguirre, primero, e Ignacio González, después. Anteriormente estuvo trabajando en la asesoría del grupo parlamentario del PP en el Congreso.
Coordinador del programa electoral
Hispán apoyó a Casado desde que lanzó su candidatura a presidir el partido. Se conocían bien: ya habían colaborado en la vicesecretaría de Comunicación de Génova cuando él era el titular del área. Así, nada más ganar el Congreso del PP, Casado lo quiso a su lado. Y meses más tarde, una vez asentado en la presidencia del partido, optó por Lasquetty.
A Hispán, entre jefatura y jefatura, le tocó coordinar el programa electoral con el que su nuevo presidente se iba a testar en las urnas, allá por el 28 de abril. Él mismo ostentó un puesto en las listas que se consideraba de salida —iba de número 2 al Congreso por Granada, ciudad con la que tiene múltiples lazos—, pero tras el batacazo no salió elegido.
Ahora, con el fantasma de unas nuevas elecciones generales sobrevolando Génova, Casado vuelve a la casilla de salida. E Hispán cuenta con un reto por delante: conseguir, tanto para él como para su presidente, que a la segunda vaya la vencida.