La alcaldesa de Móstoles, Noelia Posse (PSOE), ha contratado como coordinadora de gabinete a una de sus mejores amigas. El cargo está remunerado con 52.000 euros anuales. Momentos después de saltar la noticia, adelantada por la SER, esta persona ha dimitido.
Ocurre pocos días después de que Posse se viera forzada a despedir a su hermana, a la que fichó como responsable de redes sociales del ayuntamiento de la localidad. La polémica y las críticas externas e internas -llegó a amonestarla José Manuel Franco, secretario general del PSOE de la Comunidad de Madrid- la llevaron a corregir su decisión.
Horas después de recibir un sonoro abucheo en la noche del pregón de las fiestas y lejos de hacer autocrítica, Posse hizo pública una nota en la que, además de anunciar la destitución de su familiar, "una persona capaz y profesional", acusaba a la "ciudadanía" de no haber "comprendido" la medida. "Mi hermana está recibiendo una presión innecesaria que me empuja a tomar esta decisión. Es un acto de humildad y sinceridad, no una rectificación", sostuvo la socialista en el escrito.
La historia no acaba aquí: su tío, Héctor Vicente Posse, funcionario en el área de Cultura, fue ascendido por decreto a director técnico administrativo de Deportes, recibiendo un complemento de 1.607 euros al mes. Dada la polémica, se vio obligado a renunciar.
Pero Noelia Posse ha reincidido. Alicia Domínguez Villarino, íntima de Posse -como la propia regidora admite- ha sido por unas horas cargo de confianza en el consistorio de Móstoles.
En el poco tiempo que atesora el bastón de mando -desde febrero de 2018-, Posse colecciona varios escándalos. Nada más comenzar la legislatura, decidió en pleno subirse el sueldo de 70.236 a 82.000 euros, un incremento del 16,75%.