No está sobrado Pablo Iglesias de alfiles con autoridad en el partido. Por eso, y según ha podido saber este periódico, el secretario general ha pedido a Pablo Echenique que se prepare para el sacrificio. Será el jefe del Grupo Parlamentario Confederal de Unidas Podemos en el Congreso, reproduciendo el tándem que operaba en la sede del partido junto a Noelia Vera como portavoz y número dos.
La condición de periodista de Vera y la necesidad de cumplir la paridad -si el jefe es varón, su segundo ha de ser mujer, y al contrario-, la llevarán a ser la voz de Podemos en el Congreso. Todo, claro, si se cierran los equipos tal como están actualmente negociados entre Iglesias y Sánchez. No en vano, aún quedan muchos apoyos parlamentarios que recabar, entre ellos los de los independentistas de ERC, los nacionalistas del PNV, los diputados regionalistas y los tres escaños de Más País (Errejón)-Equo (Sabanés)-Compromís (Baldoví), que reclaman su negociación y foto propia.
El nombre de Echenique, actual secretario de Acción de Gobierno de Podemos, ya sonó para entrar en el Ejecutivo cuando Pedro Sánchez no había decidido aún que haría un "gobierno monocolor" tras la moción de censura a Rajoy. Este periódico ya informó de que Echenique hizo entonces consultas entre sus colaboradores sobre si lo seguirían "a un Ministerio".
Dar un paso a un lado
Ahora, Echenique es el jefe negociador del equipo de Iglesias, pero se ha mostrado dispuesto a dar un paso a un lado para facilitar la estrategia del líder y, también, porque la cartera que parecía que le iba a corresponder (Ciencia y Universidades) y que hoy ocupa Pedro Duque, se va a dividir en dos, quedándose en la mitad. Los comunes de Ada Colau ya dan por hecho que Universidades será su cuota en el Consejo de Ministros.
Pablo Echenique fue rival del fundador y líder de Podemos en el primer Vistalegre por hacerse con la Secretaría general. Desde entonces, y tras su derrota, se centró en la política autonómica en Aragón. Pero tras la primera de las grandes crisis del partido -el despido fulminante de Sergio Pascual, mano derecha de Errejón-, fue llamado por Iglesias para hacerse cargo de la Secretaría de Organización.
En su entorno se destaca su compromiso con el proyecto general de Podemos y, por ende, su condición de fiel escudero del líder una vez que cayó derrotado en la votación de la militancia. Eso le ha granjeado una confianza absoluta de Iglesias, acosado por las traiciones y los movimientos tácticos dentro de una formación que nunca ha terminado de tejer una estructura estable.
Y eso es lo que le achacan a Echenique sus detractores: que como secretario de Organización no supo ver -o atajar- los movimientos de Errejón, el examigo de su jefe y fundador, antes de que estallaran en enero pasado con el comunicado conjunto en el que anunciaba que se iba con Manuela Carmena.
Belarra, con Montero al Ministerio
En todo caso, En Podemos tienen claro que, cubierta la Secretaría de Organización del partido por el tinerfeño Alberto Rodríguez, hace falta que el grupo parlamentario tenga al frente alguien que inspire liderazgo y disciplina, como Echenique. Y su fidelidad conceptual y orgánica, además de su facilidad de discurso, que toma notas muy agresivas para los rivales políticos sin dificultad, le hacen muy valioso para que "alguien con peso se quede al frente del grupo ahora que se van al Gobierno Pablo e Irene".
A la número dos, que será la titular de Igualdad si todo se termina cerrando como está previsto, la acompañará en el Ministerio Ione Belarra. La cabeza de lista por Navarra tenía todas las papeletas para ser la nueva portavoz parlamentaria, después de la buena consideración que se ganó en su ejecutoria durante los meses de baja por maternidad de Irene Montero. Sin embargo, tal como informan fuentes conocedoras de la negociación, la futura ministra la quiere en su equipo, en el que ocupará un alto cargo de relevancia política.