Bilbao, mediodía, Día de la Constitución. Las coordenadas son claras y la plataforma Libres e Iguales, que llevaba desactivada desde noviembre de 2017, quiere volver por la puerta grande con un acto en defensa de la Carta Magna. ¿El motivo? La situación política que se vive, con una investidura pendiente de las negociaciones de los socialistas con los independentistas.
Así lo definió la propia portavoz de Libres e Iguales, Cayetana Álvarez de Toledo, en conversación con este periódico: la naturaleza del acto tiene sentido "contra el gobierno de sedición que pergeña Pedro Sánchez", no como una "pugna entre constitucionalistas".
Por eso, en el evento de Bilbao, que tendrá lugar este viernes en la capital vizcaína en la Plaza del Arriaga, participarán, además de la propia Álvarez de Toledo— también portavoz del PP en el Congreso—, Fernando Savater, filósofo y candidato de Ciudadanos en las pasadas europeas, o Arcadi Espada, periodista y fundador de la organización naranja.
A la cita se sumará Rosa Díez, un 'fichaje' que el PP ya empleó antes de las elecciones para acercarse al electorado de centro desencantado con Sánchez y que pidió el voto por Pablo Casado para las pasadas elecciones del 10 de noviembre. No serán los únicos, este diario ha conocido también la presencia de la asociación Esteban de Garibay, prima hermana de Sociedad Civil Catalana.
Manifiesto de Libres e Iguales
Siempre es 6 de diciembre
Hoy celebramos el día de la Constitución española. Y la queremos celebrar con más entusiasmo que en otras ocasiones porque creemos que nos hace más falta que nunca. Para defender lo que somos y también para asegurar el futuro que pretendemos compartir.
Somos ciudadanos de un estado democrático moderno gracias a la Constitución. No porque hayamos nacido en tal o cual lugar, ni porque provengamos de tal o cual familia, ni por nuestra lengua, ideología o costumbres. La Constitución nos protege frente a quienes quieren obligarnos a ser parte de una tribu ancestral de idénticos, frente a los que se empeñan en fraccionar España en mil nuevos reinos de taifas, frente a los dueños autoproclamados de la única verdad política o religiosa, frente a los que pretenden sustituir los derechos de todos por los privilegios de los que forman el pueblo elegido.
La Constitución nos hace libres porque establece nuestro común denominador. Después de aceptarlo cada uno buscará cómo vivir más feliz. La Constitución nos hace iguales, porque no le pregunta a nadie de dónde viene, sino cuáles son las reglas para que avancemos juntos. La Constitución reconoce el derecho a decidir, pero nos lo reconoce a todos y a cada uno sobre lo que es de todos: en cambio, no reconoce a nadie el derecho a decidir que los demás no decidan.
Fuera de la Constitución no hay libertades, sino una funesta diversidad de tiranías: la tiranía de los populistas que para cada problema tienen una solución simple y equivocada; la tiranía de los castizos que son “de aquí” y excluyen a los que también son “de allí”, la tiranía de los que consideran “fascistas” a quienes valoran lo personal y “comunistas” a quienes se preocupan de lo social, la tiranía de los disgregadores cuya única ideología es “¿qué hay de los mío?”. Y, sobre todo, la tiranía de los que ponen la identidad de la que presumen por encima de la única identidad constitucionalmente reconocida, que es la identidad democrática.
Por eso hoy celebramos la Constitución y proclamamos alto y claro que no nos conformaremos con ningún gobierno que la manipule o la arrincone.
¡Viva la Constitución!