El Partido Popular anunció este domingo, por boca de su presidente, que llevará al Tribunal Constitucional la decisión del Gobierno en funciones de Pedro Sánchez de no revalorizar las pensiones en el año 2020. Los populares lo argumentan en el incumplimiento de dos artículos de la Constitución Española. A saber, el 50, que obliga a los poderes públicos a "garantizar, mediante pensiones adecuadas y periódicamente actualizadas, la suficiencia económica a los ciudadanos durante la tercera edad"; y el 86, que explica las condiciones por las que un Ejecutivo puede acudir al decreto-ley para legislar.
Y es que precisamente lo que ha hecho el Gobierno socialista es "acudir a un decreto para evitar la subida de las pensiones, que está marcada por ley". Mario Garcés, secretario de Programas y portavoz adjunto del Grupo Parlamentario Popular en el Congreso de los Diputados, lo explica así en conversación con este periódico. La Ley general de la Seguridad Social prevé la revalorización automática de las pensiones "y lo que ha hecho Sánchez es un insólito decreto para que no suban".
Lo cierto es que ese real decreto fue aprobado en el último Consejo de Ministros del año, el del pasado viernes 27 de diciembre. Se esperaba que en esa reunión el Gobierno cumpliera su compromiso de aprobar un alza de estas prestaciones en un 0,9%, como constaba en las cuentas enviadas a Bruselas por Sánchez y en reiteradas declaraciones públicas de la ministra de Trabajo en funciones, Magdalena Valerio.
“El Gobierno de Sánchez es incorregible", lamenta el dirigente popular. "Primero fue la retención de recursos a las comunidades autónomas a cambio de que apoyáramos la formación de Gobierno", recuerda remitiéndose a la negociación de Sánchez con Unidas Podemos en la anterior -y fallida- legislatura. "Ahora, nos vienen con la congelación de las pensiones bajo el argumento falaz de que sólo se revalorizarán cuando haya un Gobierno con competencias plenas".
Los de Pablo Casado recuerdan que sólo dos gobiernos, y ambos del PSOE, han congelado las pensiones, en 2011 y ahora en 2020: "Sánchez está emulando a Zapatero", afirma Garcés. O incluso peor, porque comenzó "poniendo en riesgo el sistema educativo, sanitario y la dependencia, y ahora acaba por congelar las pensiones".
Los argumentos
En el texto legal aprobado [léalo aquí], el Ejecutivo utiliza tres argumentos para justificar su decisión. El primero es que está "en funciones", y "resulta inevitable en las actuales circunstancias posponer la aplicación de esta medida hasta el momento en que el Gobierno se halle en pleno uso de su capacidad propositiva y normativa".
El segundo, que "la subida mínima del 0,25 por ciento contenida en el citado artículo obligaría a duplicar la realización de un aplicativo informático concreto". Es decir, que el Ejecutivo alega un problema informático para hacer las dos subidas: la primera, del 0,25% que marca la ley; y la segunda, de un 0,65% más para alcanzar el 0,9% al que se ha comprometido.
El tercer argumento que arguye Sánchez llama mucho la atención, pues habla de una situación financiera catastrófica de la Tesorería de la Seguridad Social: "El equilibrio financiero de la Seguridad Social exigiría que la revalorización viniera acompañada de otras medidas dirigidas a reforzar los ingresos del sistema", explica el texto legal. Es decir, que no hay dinero para la subida prometida de las pensiones.
Y añade que "en este momento no pueden adoptarse" esas medidas -acudir a un crédito extraordinario vía presupuestaria-, "al ir más allá del despacho ordinario de los asuntos públicos que en este momento limitan la gestión del Gobierno".
El PP responde
Es decir, que en vez de subirse las pensiones, se decreta que se congelen porque el Ejecutivo está en funciones y resulta "inevitable". Sin embargo, en el año 2015 el Ejecutivo de Mariano Rajoy sí subió, estando en funciones, las prestaciones a los jubilados y dependientes del sistema -huérfanos, viudas y demás no contributivas-. El PP señala que es "categóricamente falso que no puedan revalorizar las pensiones a partir de enero de 2020".
Para Mario Garcés, "supeditar la revalorización a una formación inminente de Gobierno es jugar con todos los pensionistas de este país". Y más aún en este "escenario de absoluta inestabilidad" política y donde "la incompetencia de Sánchez hace que sea impredecible el momento en que se forme Gobierno".
En todo caso, los populares no pueden estar más "sorprendidos" con la segunda razón que aduce Sánchez, la del problema informático. "Argüir que es una disfunción del sistema operativo incrementar las pensiones en dos fases, el 0,25% aprobado por el Gobierno de Rajoy y su anuncio eventual de un 0,65% posterior, es un insulto y una provocación a nuestros pensionistas".
Disculpas y rectificación
El portavoz económico del PP, de hecho, exige a Sánchez que se disculpe: "Si para Sánchez prima el automatismo de un sistema informático frente a las necesidades de los pensionistas para atender sus gastos necesarios, lo único que queda es que pida perdón y rectifique inmediatamente”.
Y además los populares señalan de manera implícita el riesgo del Gobierno que está negociando Sánchez con Unidas Podemos, que promete una enorme subida del gasto público. "En el decreto, el Ejecutivo reconoce que el desequilibrio en la Seguridad Social es de tal intensidad que no se pueden atender las necesidades ordinarias del sistema sin recursos adicionales".
Casado llevará lo antes posible el recurso ante el Constitucional. Según las fuentes consultadas en el PP, los servicios jurídicos del partido ya están estudiando los argumentos jurídicos. Porque la violación de los dos preceptos citados de la Carta Magna les parece palmaria, "pero queda mucho por trabajar".