El Gobierno ha salido al paso del comunicado del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) crítico con el ataque de Pablo Iglesias este martes en una entrevista. Lo ha hecho para defender a su vicepresidente segundo en su "libertad de expresión y derecho a la crítica". En concreto, Iglesias afirmó que "es una humillación para el Estado español que jueces europeos le quiten la razón a jueces españoles".
El presidente del Tribunal Supremo y del órgano de gobierno de los jueces, Carlos Lesmes, no tardó este miércoles en convocar una reunión extraordinaria de la Comisión Permanente para aprobar un texto en el que pide a Iglesias "moderación, prudencia y mesura", apelando a la "responsabilidad institucional para evitar la utilización política de la Justicia".
Horas más tarde, Moncloa ha contestado considerando que "es tiempo de dialogar y aportar acuerdos que refuercen nuestras instituciones", aludiendo al "deber de todos de velar por el correcto funcionamiento de la Justicia y contribuir de esa manera a poner al día sus órganos de gobierno, evitando que su acción se resienta por el bloqueo", en una clara alusión al PP.
"En esa actitud de diálogo -continúa la nota de Moncloa-, dentro del respeto a la libertad de expresión y el derecho a la crítica, tal y como reconoce el CGPJ en su comunicado, es donde está el gobierno y donde pedimos que también esté la oposición".