El pin parental que exige Vox allí donde el partido de Santiago Abascal sustenta gobiernos de PP y Ciudadanos ha abierto un debate social entre los partidos políticos y colectivos académicos con manifestaciones a favor y en contra de implantarlo.
Pero ¿qué es el pin parental? Se trata, según define Vox en su programa electoral, de “una solicitud dirigida a los directores de los centros educativos en los que estudian nuestros hijos”. Una instancia con la que los padres pueden solicitar al colegio que les informe previamente, “a través de una autorización expresa sobre cualquier materia, charla, taller o actividad que afecte a cuestiones morales socialmente controvertidas o sobre la sexualidad”.
¿A qué tipo de cuestiones se refiere? Aquellas “que puedan resultar intrusivas para la conciencia y la intimidad de nuestros hijos, de tal modo que como padre o madre pueda conocerlas y analizarlas de antemano, reflexionar sobre ellas y en base a ello dar mi consentimiento o no, para que nuestro hijo asista a dicha formación”.
No es un pin físico
A pesar de su nombre, no consiste en un pin físico, sino un escrito para que las familias tengan una información previa y deben su autorización para recibir educación afectivo-sexual. Consulte aquí el formulario que propone Vox.
Es decir, se trata de un mecanismo de control por el cual los padres pueden decidir sobre las materias que reciben sus hijos por parte de personal ajeno al centro educativo, aunque el profesorado lo considere necesario.
La polémica
La polémica con el pin parental ha surgido esta semana. ¿El motivo? Se ha convertido en uno de los requisitos que el partido de Santiago Abascal quiere imponer en la Región de Murcia, en la Comunidad de Madrid y en Andalucía para dar apoyo a sus presupuestos.
Para Vox, el pin parental será necesario en los centros para actividades de carácter afectivo-sexual, diversidad sexual y modelos de familia y que “no es más que un instrumento para dar a los padres libertad de elegir”, en palabras de Iván Espinosa de los Monteros, portavoz parlamentario del partido verde.
Lo que pide Vox significa que los padres puedan limitar la participación de los alumnos en ciertos talleres, en concreto los relativos a sexualidad. Sin embargo, estos contenidos y otros que tienen que ver con materia LGTBI están contemplados en las leyes autonómicas y persiguen el fin de educar en la diversidad.
¿Funciona en alguna CCAA?
El pasado mes de septiembre, la Consejería de Educación de Murcia, región gobernada por PP y Cs, establecía que los centros educativos, desde infantil hasta bachillerato, debían informar a las familias de las "actividades complementarias" previstas en clase para que decidieran la asistencia de sus hijos. Una posibilidad de "veto" que el Ministerio de Educación considera "ilegal" y que vulnera "el derecho a la educación" de los escolares.
La medida fue un requisito para que Vox apoyara la investidura del PP y Cs. Ahora, PP y Cs han firmado un acuerdo con Vox para sacar adelante las cuentas de 2020 que incluye el pin parental.
El partido liderado por Abascal pedía que el pin parental se reforzara, enviando un documento oficial estandarizado a todos los colegios. Cs ha apoyado que exista una autorización previa de las familias, pero al mismo tiempo ha anunciado que pedirá en el Consejo de Gobierno un informe de los servicios jurídicos con el fin de "aclarar" la legalidad de la instrucción enviada por la consejería de Educación a los centros de enseñanza.
Qué dice el Gobierno
El Gobierno (PSOE y Unidas Podemos) ya ha advertido de que “responderá con contundencia” ante cualquier actuación “que vulnere los derechos de los menores” y ha anunciado que recurrirá por la vía administrativa o judicial las medidas que en este sentido tomen PP, Vox y Ciudadanos allá donde gobiernen.
"Vulnera el derecho fundamental de los niños a ser educados. Es un instrumento de censura educativa que no podemos tolerar en nuestras escuelas", ha defendido Isabel Celaá, ministra de Educación, en la rueda posterior al Consejo de Ministros celebrada este viernes.
Celaá ha afirmado que es contrario al "derecho fundamental y constitucional" de toda persona, "desde su nacimiento", a ser educada. "No podemos pensar de ninguna de las manera que los hijos pertenecen a los padres", ha añadido.
"Los hijos e hijas de padres y madres machistas tienen el mismo derecho a ser educados en valores igualitarios", "en libertad y en feminismo", "de amar a quien quieran y cuando quieran", ha manifestado la ministra de Igualdad, Irene Montero.
Qué dicen PP y Cs
Desde el PP, su secretario general, Teodoro García Egea, ha afirmado que el pin parental es una medida que ya funciona en Murcia desde hace meses y ha defendido la libertad de los padres para elegir la educación que reciben sus hijos.
En medio de la polémica, el portavoz adjunto de Ciudadanos, Edmundo Bal, ha negado este viernes que haya pactado ese tema en Murcia o en cualquier otra comunidad donde gobierna con PP y el apoyo de Vox.
"Siempre hemos votado en contra cuando se ha planteado. Es un mensaje erróneo porque no aceptamos ese concepto", ha asegurado Bal en una rueda de prensa en el Congreso al explicar que el acuerdo al que han llegado en Murcia con Vox o en Andalucía es que en materia de enseñanza se deberán cumplir "los principios constitucionales con respecto a la educación y los derechos de los niños y de los padres".
En Madrid
Desde Madrid, el vicepresidente de la Comunidad, Ignacio Aguado (Ciudadanos), ha asegurado que no se ha dado "ningún paso" para implantar esta medida y ha emplazado al partido de Abascal a presentar en la Asamblea una ley si quiere cambios normativos al respecto.
Sin embargo, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha dicho que "cualquier medida" como el pin parental le parece "adecuada y acertada" para "garantizar el derecho fundamental" de los padres a educar a sus hijos "libremente".