Irene Lozano da el salto de la política exterior al deporte. La hasta ahora secretaria de Estado de España Global pasa a ocupar la presidencia del Consejo Superior de Deportes como secretaria de Estado para el Deporte, un cargo en el que sustituye a la esquiadora María José Rienda, nombrada en su momento también por Pedro Sánchez, y para el que no se le conoce experiencia previa en el sector.

Encargada de dirigir la Secretaría de Estado de la España Global, dirigida a adoptar las medidas para la mejora de la imagen exterior de España, Lozano (Madrid, 17 de junio 1971), es licenciada en Lingüística por la Universidad Complutense de Madrid y diplomada en Filosofía por el Birkbeck College de la Universidad de Londres.

Escritora y periodista, se desempeñó como editorialista en el diario El Mundo entre 1995 y 2005 y después como columnista en ABC, justo antes de dar el salto a la política de la mano de UPyD en 2011.

Ya como diputada nacional de la formación rosa y tras perder las primarias frente a Andrés Herzog en 2015 decidió abandonar su escaño. Las negociaciones con Ciudadanos para incorporarse al partido no cristalizaron y Lozano acabó presentándose como independiente en el número 4 de la lista del PSOE por Madrid en las diciembre de 2015.

Desde entonces, la suya ha sido una de las figuras capitales de los gobiernos de Pedro Sánchez, primero como secretaria de Estado de España Global y ahora como secretaria de Estado para el Deporte, aunque en torno a ella siempre quedará la polémica publicación del libro del presidente del Gobierno, Manual de Resistencial.

"Yo hice el libro, pero el autor es el presidente". Así se expresó la nueva presidenta del CSD después de que estallara la polémica sobre la autoría del libro de Pedro Sánchez que únicamente firmaba él. "El autor es él, yo solo le he dado forma literaria porque me dedico a ello", insistió en una entrevista en la Cadena Ser echando más leña al fuego. 

Ahora la polémica rondará una vez más a Irene Lozano por su desconocimiento de un sector como en el deportivo y, además, en un año especialmente complicado como 2020, donde España estará representada, entre otros muchos eventos deportivos, en la Eurocopa 2020 -España jugará sus tres primeros partidos en Bilbao- y en los Juegos Olímpicos de Tokyo con una delegación que rondará los 300 deportistas.

Además, Lozano se enfrentará a problemas tan actuales como la igualdad de la mujer en el deporte de alto rendimiento, con el primer escollo de la firma del convenio de las futbolistas con la Federación Española de Fútbol y los clubes, la equiparación salarial o la lucha contra la ludopatía desde dentro del deporte profesional.

Cataluña

En cualquier caso, con esta decisión, Sánchez la aparta de la oposición al 'procés'. El nuevo gobierno PSOE-Unidas Podemos no tiene entre sus prioridades combatir en el exterior los esfuerzos del independentismo por dañar la imagen de España. Así se concluye de la reorganización que ultima el Ministerio de Exteriores y que se ratificará este martes en Consejo de Ministros.

El nuevo organigrama, que ya se ha dado a conocer a los altos cargos de la cartera que dirige Arancha González Laya, mantendrá cuatro secretarías de Estado: Asuntos Exteriores, Unión Europea, Cooperación Internacional y España Global. Así, Iberoamérica pasa a un rango menor –dirección general–, dentro de Asuntos Exteriores.

España Global, por otro lado, y según avanza Exteriores, tendrá más peso porque bajo su órbita se situará a partir de ahora la comunicación pública, conocida habitualmente como Oficina de Información Diplomática (OID). Incorporará también una dirección general dedicada a la diplomacia económica.

Manuel Muñiz, actual decano de la Escuela de Asuntos Globales y Públicos del IE, será el encargado de ocupar su cargo. Su misión será la proyección exterior de España, a través de tres direcciones generales: una dedicada a estrategia, prospectiva y coherencia de la acción exterior, otra para la diplomacia económica y una tercera dedicada a comunicación, diplomacia pública y redes.

Sin embargo, y más allá de que el Gobierno trate de pregonar que el departamento de España Global se está “reforzando” al asumir nuevas funciones, lo llamativo es que con esas nuevas tareas se difumina la labor de contrarrestar la propaganda exterior del separatismo catalán. Se trata de una nueva cesión del Ejecutivo de Pedro Sánchez a ERC tras el pacto para facilitar su investidura. Algo a lo que se suma el nuevo cargo de Lozano.

La batalla del relato

Durante la etapa de Josep Borrell al frente de Exteriores, España Global, hasta entonces conocida como Alto Comisionado para la Marca España, se creó como Secretaría de Estado, y se le asignó un presupuesto que hasta entonces no tenía.

Se convirtió en el órgano superior responsable de adoptar las medidas para la mejora de la imagen exterior de España, centrando su labor en combatir la propaganda indepe. La tesis era que había que poner remedio al daño causado a la imagen de España en Europa por la pasividad del Gobierno de Mariano Rajoy. Es decir, ganar la batalla del relato.

Pero ahora el eje no será ese. De hecho, la propia ministra de Exteriores, Arancha González Laya, afirmó el pasado 20 de enero que veía “bastante reduccionista” pensar que España Global se centrara únicamente en contrarrestar la estrategia independentista en el exterior.

Desde el departamento que comandaba Irene Lozano alegaron que su objetivo siempre ha sido realizar un espectro de actividades amplio para proyectar la reputación de España en el mundo, pero que han estado limitados por las circunstancias y la escasez de medios con que fue creada la Secretaría.

Lo más destacable de aquella etapa fue la publicación del informe La realidad sobre el proceso independentista, un documento de 63 páginas dirigido a medios de comunicación extranjeros y diplomáticos europeos donde se desmontaban las principales mentiras de los líderes políticos y civiles del procés.

Cambio de rumbo

Pero ahora anunciaban que España Global cambiaba su rumbo y tendrá “una orientación importante hacia la diplomacia económica”, según confirmó la ya ex secretaria de Estado de España Global. Sobre su continuidad en el puesto, la exdirigente de UPyD dijo tener “cero” indicios.

Hasta ahora, y según palabras de Lozano, el trabajo de este departamento se ha asociado “por las circunstancias políticas y por el juicio [al procés], inevitablemente, a Cataluña, pero que es un trabajo que teníamos que hacer porque mucha gente realmente no es consciente y porque los tópicos sobre España son muy persistentes”.

Ahora las prioridades son otras: “Con la trayectoria de la ministra, muy enfocada en lo económico y comercial desde hace décadas, es evidente que España Global va a tener una orientación importante hacia la diplomacia económica”.