El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, ya ha iniciado este domingo la precamapaña de unas elecciones autonómicas catalanas que no tienen fecha. Aun así, los hitos políticos hasta que se cierre una legislatura que el líder del PSC ve "agotada de manera evidente", alimentan los mensajes de tipo electoralista. Y en ese contexto, el PSC se ve que quiere ganar votos por la vía nacionalista, haciendo suyo el discurso de Artur Mas en 2014: "el pacto fiscal".
No habla Iceta de nueva financiación autonómica, que incluiría a todas las 17 CCAA; ni habla de un nuevo Estatut, un tema que ya salió mal hace una década; tampoco se apunta a revisar el cumplimiento de la norma actual, porque ya se han logrado compromisos por parte del Ejecutivo de Pedro Sánchez. Lo que hace es asumir la terminología nacionalista y colocarse en la casilla de salida del procés, cuando el PSC dice que todo se torció, argumentando que Mariano Rajoy le dijo "no" a Artur Mas, eso desató el independentismo en la vieja CiU, y el tigre se desbocó.
Según Iceta, que ha sido entrevistado en Catalunya Ràdio, "es evidente" que la legislatura catalana está agotada, ha afirmado que si vuelve a haber una mayoría independentista habrá un gobierno independentista, y ha reclamado un mejor pacto fiscal para Cataluña.
"Todas las encuestas nos dicen que la mayoría de catalanes quieren un mejor pacto fiscal. Desde 2014 se debería haber revisado este pacto y no se ha hecho porque el Govern no quiere", y ha criticado que ni siquiera se presente a las reuniones. Efectivamente, la Conselleria de Hacienda presentó a su número tres en el último encuentro del Consejo de Política Fiscal y Financiera.
Mesa de gobiernos
Por otro lado, y en vísperas de la primera reunión de la mesa de diálogo entre el Gobierno de España y el de la Generalitat, que tendrá lugar este miércoles, Iceta ha advertido que no se debe confiar en que ésta termine en "algún tipo de acuerdo". el primer secretario del PSC ha indicado que tampoco piensa que el Gobierno aceptará un referéndum de independencia: "No es un objetivo que compartimos".
Obviando que es la Constitución la que no permite ese planteamiento, pues consgra que la soberanía reside en el pueblo español, Iceta argumenta: "Yo creo que en nuestra agenda, en nuestro proyecto, la independencia no cabe porque hemos constatado que la sociedad catalana está dividida casi por la mitad con esto", y ha opinado que consagrar una división de esta naturaleza no puede ser la solución.
Ha afirmado que deben ir a la mesa de diálogo "con una posición realista, sin expectativas muy elevadas que no se cumplan y que creen frustración" porque las posturas del Gobierno y la Generalitat son muy diferentes.