Un referéndum acordado sobre la independencia como el que pactaron Reino Unido y Escocia. Esta ha sido hasta ahora la propuesta que JxCAT y ERC han ofrecido al Gobierno. Primero al de Mariano Rajoy a través de un artículo en 2017 firmado por Carles Puigdemont y Oriol Junqueras. Después a Pedro Sánchez. Pero las tornas han cambiado y ahora al expresidente de la Generalitat esta opción ya no le vale y opta por otro referéndum: el de Montenegro.
En una entrevista en Catalunya Ràdio, Puigdemont ha reclamado no renunciar a la vía unilateral, que considera que es "legítima" y el "último recurso", y ha puesto como ejemplo el caso de Montenegro, que logró su independencia en 2006 en un referéndum pactado con Serbia y la comunidad internacional.
El expresident fugado rechaza, por tanto, el referéndum a la escocesa que lleva más de tres años defendiendo y opta por el de Montenegro, con una pregunta pactada -"¿Desea que la República de Montenegro sea Estado independiente con plena legitimidad conforme al Derecho internacional?"- y con una validez asegurada si votaba más del 50%. Pero la parte que más gusta a Puigdemont es otra, y es que el proceso de independencia se activaba si al menos el 55% de los votos eran afirmativos, una cifra que está convencido se lograría en Cataluña.
Preparar un "escenario B"
Puigdemont también ha hecho un llamamiento a preparar un "escenario B" en caso de que la negociación con el Estado fracase sin renunciar a la vía unilateral.
Ha argumentado que en el acto de Perpiñán (Francia) llamó a prepararse para la lucha definitiva "porque hoy no se está preparado". "Como estamos convencidos de que, por desgracia, la manera de llegar a la independencia deberá ser superando una pared que el Estado tiene preparada siempre para nosotros, y no a partir de una mesa de negociación en la que podamos acordar los términos de un referéndum, tenemos que llegar a la pared más preparados que en otoño de 2017", ha sostenido.