El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, aseguró este lunes que el Gobierno “está estudiando” un sistema de vigilancia a través de los móviles para evitar que una persona que ha dado positivo en Covid-19 pueda contagiar a otros ciudadanos.
Según el ministro, se hará con “respaldo jurídico”, con el fin de evitar la propagación del patógeno y servirá para ampliar las actuales funcionalidades de la aplicación móvil que el Ejecutivo ha puesto en marcha. En la actualidad, los ciudadanos que se descargan la app pueden, de forma voluntaria, monitorizar su salud y la evolución de la enfermedad.
Después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunciara su intención de prorrogar el estado de alarma, una de las principales críticas al Ejecutivo es la erosión que se está produciendo en el sistema democrático. Y ahí se incluye el tener la actividad del Congreso limitada y sin que puedan fiscalizar las actuaciones del Gobierno.
Consciente de ello, Campo quiso reiterar que la iniciativa de control a través de la eventual monitorización de los móviles responderá a los criterios de las “autoridades médicas” y se ejecutará de “forma respetuosa con el ordenamiento jurídico”.
“Piensen en alguien que va al hospital y da positivo pero es asintomático y le mandan a casa. ¿No es razonable que establezcamos un mecanismo por si esta persona sale podamos decir que está contagiado a la ciudadanía? Hay que hacerlo de una manera respetuosa con el ordenamiento jurídico”, abundó.
Además, esta opción formaría parte del plan del Gobierno para la reactivación económica, consistente en "test rápidos masivos" para controlar periódicamente a todos los ciudadanos y tener así una fotografía de los enfermos así como de los asintomáticos.
El pasado 28 de marzo ya se aprobó el rastreo de los movimientos de los ciudadanos mediante la colaboración de las teleoperadoras.
Protección de datos
Ante la posible vulneración del derecho a la protección de datos, el titular de Justicia considera que en ningún caso esta opción -que de momento solo es está valorando aplicar- atenta contra estos derechos. Se trata de un “mecanismo” de control que ya cuenta con el respaldo de la “Agencia de Protección de Datos”, según dio a entender el ministro.
Campo puso el ejemplo de sucesos que ya están ocurriendo y en el que los tribunales y policías tienen que intervenir cuando está en juego la salud de todos: “Lo vemos más drásticamente cuando los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad se encuentran a alguien reticente o incluso los jueces están ordenado prisión provisional porque esa persona hay que retirarla del circuito porque está contaminando y está contagiando a ciudadanos”.
En algunos países, como Corea del Sur o Singapur ya se usa el móvil con esta finalidad de evitar propagación de contagios. Se trata de modelos que usan tanto la geolocalización como sistemas de Bluetooth.
El Gobierno todavía no ha especificado cómo funcionará este “mecanismo”, pero por lo que dejó entrever el ministro ya se ha contactado con los expertos, y el criterio médico irá acompañado del criterio judicial para evitar tanto el contagio como las posibles consecuencias de que las autoridades públicas controlen a sus ciudadanos.