El Gobierno podría estar dinamitando los pactos de la Moncloa antes de sentarse a negociarlos. El gabinete de Pedro Sánchez lleva días anunciando que abrirá una mesa de negociación que permita a España salir de esta crisis unidos, pero no levantó el teléfono para convocar a nadie.
El líder de la oposición, Pablo Casado, se enteraba este martes a través de la ministra portavoz en rueda de prensa de que sería el primer líder de la oposición en ser recibido por el presidente el jueves, en el Palacio de la Moncloa.
Esas declaraciones entraron por la ventana de Génova como un misil. El entorno del líder del PP reconocían que se enteraba del encuentro en ese mismo instante en el que lo anunciaba María Jesús Montero. El PP reclamó su espacio y recordó al Gobierno que su partido tiene una trayectoria institucional "demasiado relevante en los últimos cuarenta años como para consentir más desplantes e insultos de este Gobierno".
Los equipos
El equipo de Casado explicó que se necesita un "acuerdo previo con un mínimo de respeto al principal partido de la oposición" para sentarse a negociar sobre cuál debe ser la fórmula más adecuada para atajar la crisis provocada por la pandemia.
Sánchez lleva sin comunicarse con el líder del PP desde hace once días. Con su actitud de convocarle a una reunión a través de una comparecencia en Moncloa, en el PP piensan que el Gobierno demuestra "su nula voluntad de pacto" y una "arrogancia" e "incapacidad" que "dificulta cualquier colaboración" con la oposición.
El PP no rompió del todo el filo hilo que aún le mantiene unido con el Gobierno, al que le ha cedido en dos plenos consecutivos los votos para prorrogar el estado de alarma, pero mantenía en suspense si Casado iría o no a la convocatoria del presidente.
A media tarde, era el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, el que aseguraba -también en rueda de prensa- que los dos equipos ya se habían puesto de acuerdo y volvía a insistir en que la reunión bilateral entre Sánchez y Casado estaba cerrada para el jueves.
A última hora de la tarde, el equipo de Pablo Casado aseguraba que habían sido ellos, desde Génova, los que habían contactado con el equipo del presidente Sánchez para trasladar su "disconformidad" con las formas de hacer las cosas y para informarles de que, "en el caso de que tengan interés en que se produzca un encuentro", se acuerde una fecha conjunta en los próximos días.
"En una crisis de esta envergadura, con 18.000 fallecidos por culpa del coronavirus, 567 de ellos solo en el día de hoy, no podemos entender este comportamiento del Gobierno con el principal partido de la oposición", manifestaron.