La dirección de Podemos ha ordenado rectificar a Pablo Echenique en su rechazo a la comisión de investigación sobre el papel de Felipe González en los GAL. Pablo Iglesias estaba preocupado tras el anuncio de que su grupo parlamentario taparía el terrorismo de Estado y la posible implicación del expresidente en los crímenes.
Según ha podido saber este periódico, la división entre los pragmáticos que aprobaban la posición tomada públicamente por Pablo Echenique y quienes consideraban que no se puede tapar el terrorismo de Estado ni encubrir a un "expresidente con el pasado manchado de cal viva" la han ganado estos últimos.
En la cúpula del partido morado insistían que que "había que dar marcha atrás" y que Echenique había cometido un error de precipitación. Como cuando en su primera Junta de Portavoces, recuerdan, votó en contra de publicar el historial de Billy el Niño, apodo del inspector de la Brigada Político Social del franquismo Juan Antonio González Pacheco.
Algunas fuentes consultadas, que prefieren mantener el anonimato, acusaron a Echenique de haberse precipitado anunciando una decisión que no había sido avalada por la Ejecutiva. Y todo con el único objetivo de agradar al PSOE, como el día que se pilló los dedos con lo de Billy el Niño recién estrenada la legislatura.
Desde que el pasado lunes, Bildu presentó su escrito en el registro del Congreso solicitando una comisión de investigación en la que comparecieran el ex jefe de Gobierno socialista y el actual ministro del Interior -y en el pasado uno de los jueces de la Audiencia Nacional más activos contra ETA-, Fernando Grande-Marlaska, la incomodidad se instaló en la formación de Pablo Iglesias.
No había otra: debían elegir entre ser fieles a sus principios o leales con su socio de Gobierno. De hecho, las fuentes oficiales consultadas aquella tarde por este periódico prefirieron no tomar posición ante la petición de la formación heredera de Batasuna, sabiendo que les quedaba más de una semana para decidir, hasta que el martes que viene la Mesa tenga que calificar la solicitud.
Sin embargo, a los dos días Echenique, secretario de Programas, se pronunció por todos ellos, a pesar de que tras la última Asamblea Ciudadana, el nuevo Consejo de Coordinación aún no se ha reunido una sola vez. El portavoz parlamentario aseguró que "ya todo el mundo sabe lo que pasó", motivo por el que justificó la negativa a esclarecer los crímenes de los GAL, ya que "nada nos hará distraernos de la prioridad, que es la recuperación económica y social".
Todo esto, al mismo tiempo que preparaba su recurso ante la negativa de la Mesa a aceptar otra comisión de investigación, esta vez, presentada por Podemos, y también sobre el pasado: la que pretendía indagar sobre los presuntos negocios ilegales del rey emérito Juan Carlos con Arabia Saudí. El escrito, anunciado a bombo y platillo por el propio Echenique, lo entretuvo hasta el jueves a mediodía.
Llamada a Iglesias
"Forma parte de nuestro ADN, como las cloacas de Villarejo", explicaba un exdirigente a este periódico a propósito de ambos temas. "Este sapo no nos lo podemos tragar", decía otro, refiriéndose al terrorismo de Estado. "Fue Pablo el que habló de la cal viva en el Congreso", recordaban fuentes oficiales del partido", para defender la posición "histórica" del partido en estos temas. Que ahora se ha visto refrendada con la orden al portavoz para que rectifique públicamente.
En la interna de Podemos había mucho movimiento, las bases habían hecho saber su enfado y Pili Zabala -hermana de Joxi Zabala, secuestrado, torturado y asesinado por los GAL-, que fue cabeza de lista morada en las autonómicas de 2016, llamó personalmente a Iglesias el jueves para mostrarle su "decepción, inquietud, preocupación y desprecio".
"Del Podemos de hace unos años ya no queda nada, está roto", explicaba el exdirigente Ramón Espinar en este periódico. "El proyecto de refundación de España, de regeneración democrática ya no está".
Según las fuentes consultadas, en el seno de la dirección se masticaba el enfado por que una decisión como ésta no se hubiera tomado en los órganos oficiales. Creen que Echenique no evaluó bien los equilibrios con el PSOE, y ponen como ejemplo de lo delicado del asunto que la misma dirección de Podemos en el País Vasco desmarcándose de la posición oficialista.
Elkarrekin Podemos emitía un comunicado junto a IU Euskadi exigiendo que se "esclarezca de una vez por todas la responsabilidad del que fuera presidente del Gobierno, Felipe González, en el GAL". El movimiento se entendió en Madrid, dado que queda apenas una semana para que comience la campaña para los comicios autonómicos del próximo 12 de julio.
Dos explicaciones
Y a ese contexto electoral atribuyen parte de las fuentes consultadas la oportunidad de que este asunto regrese a la actualidad. Un exdirigente, muy cercano a Iglesias en su momento, señalaba que hablar de la desclasificación de unos papeles de la CIA que datan de 1984 y que ya salieron a la luz hace un par de años "a quien le conviene es a Bildu". Y en ese contexto, lo lógico habría sido que la rectificación de Podemos llegara cuando pase esta etapa. Pero la presión ha sido insportable.
Otra explicación que apuntas las fuentes consultadas para que Podemos se haya visto en medio de este fuego cruzado es un posible "recadito" del PSOE a Felipe González, enemigo declarado del vicepresidente segundo, de sus políticas, de su pasado cercano al régimen venezolano del que abomina el expresidente y del mismo acuerdo de Gobierno con los socialistas.
"Lleva semanas queriendo romper el Gobierno", explican desde Podemos, para indicar que quizás haya sido el mismo entorno de Sánchez el que quisiera lanzar una advertencia. En Podemos recuerdan la mala relación que mantienen el presidente y González. Que éste último además no la oculta, como si presumiera de ella, cuando pregona sin miramientos "no me ha llamado una sola vez". Y que el jefe del Ejecutivo sigue culpándole -a él y a Rubalcaba- de que el Comité Federal del partido lo defenestrara en su primera etapa como secretario general.
De hecho, el secretario general del PSE-EE de Guipúzcoa se había unido a la posición de sus compañero de Podemos en el País Vasco este miércoles. Eneko Andueza aseguraba que entiende la lealtad en política "de otra manera" a como la entiende Felipe González, y que, aunque no es partidario de "hacer purgas" en las formaciones políticas, considera que en el PSOE "en algún momento deberemos decirle a Felipe González que ya basta".
Y es que la nota de Podemos Euskadi aseguraba que el Estado "mantiene una deuda histórica con las víctimas de esta violencia política" y que sólo sería saldada asumiendo las "responsabilidades históricas" con las muchas víctimas de los GAL, que operaron entre 1983 y 1987.