El PNV presenta por cuarta vez en cuatro años una iniciativa de reforma de la ley de secretos oficiales. El empeño de los nacionalistas vascos es el de actualizar un texto que le sigue otorgando poder de clasificar informaciones al Consejo Nacional del Movimiento, que permite declarar secretos hasta los motivos de un secreto, que da el poder a cualquier jefe de los Ejércitos para clasificar informes...
Aitor Esteban, portavoz del PNV en el Congreso, ha atendido a EL ESPAÑOL a pocas horas de que el Congreso vote la toma en consideración de una iniciativa "levantar el velo y arrojar luz" sobre aspectos controvertidos de la Transición española: el posible papel de Felipe González en los GAL -cuya comisión de investigación ha sido rechazada este martes con los votos de PSOE, PP y Vox en la Mesa-, la verdad sobre la posición del Rey Juan Carlos la noche del 23-F o sobre sus presuntos negocios oscuros cobrando comisiones a cuenta de sus gestiones diplomáticas y comerciales con otros países.
Lo hace tasando y acortando los plazos para la desclasificación de hechos considerados secretos (25 años) o reservados (10). Y además actuando de manera retrospectiva, en contra de lo que trató de introducir el Gobierno del PSOE vía enmienda, cuando se negoció por última vez esta iniciativa en el Congreso, en la pasada legislatura. Entonces, los socialistas quisieron introducir una moratoria de 10 años más para los aspectos que pudieran verse afectados por la entrada en vigor de la reforma.
Entretanto, la Mesa fue ampliando el plazo de enmiendas, lo que atascó la reforma en los despachos. Los peneuvistas criticaron "el secretismo" de los partidos y su empeño en "meter la reforma en un cajón".
Pero su reforma también da acceso a todos los diputados y senadores a cualquier materia reservada, un aspecto controvertido para partidos como PP y Cs, viniendo de quien viene la proposición, y con la desconfianza que le tienen estas formaciones a los grupos nacionalistas e independentistas.
¿Tiene sentido que los diputados puedan acceder a todos los secretos oficiales, como propone el PNV en su reforma?
El PNV propone una desclasificación de documentos atendiendo a criterios temporales, como sucede en la mayoría de las democracias avanzadas. Transcurrido ese tiempo, los documentos serán accesibles a la ciudadanía en general, no a los y las diputadas en particular. Es una cuestión de transparencia, de accesibilidad y de actualizar una ley franquista que permite que incluso las decisiones por las que se clasifican los documentos sean secretas.
Pero su texto plantea que todos los diputados y senadores puedan acceder a los secretos...
En lo que respecta al artículo 10 de la ley, relativo al acceso de los y las diputadas a estas materias, no se establece ninguna modificación en nuestra propuesta, sino que lo que se pretende es que la regulación con respecto al acceso de los y las diputadas y senadores lo establezcan los reglamentos de Congreso y Senado. Añadir que en la Comisión de Secretos Oficiales, al menos en las últimas cuatro legislaturas, nunca se ha visto un documento secreto.
¿No hay riesgo de que los asuntos que son materia reservada puedan filtrarse a la opinión pública?
Con la reforma que proponemos no caben filtraciones: una vez transcurrido el tiempo que establece la ley (en nuestra proposición de ley, 25 años), los documentos serán desclasificados. Precisamente, lo que se trata es de evitar filtraciones interesadas como sucede hoy en día, donde todo está clasificado y al albur de que al Gobierno de turno le interese dar a conocer alguna información concreta como ya ha sucedido.
Además, la reforma propone acotar los plazos de desclasificación de materias reservadas y secretas: ¿Quiere el PNV "levantar el velo" sobre el presunto papel de Felipe González en los GAL?
El PNV quiere levantar el velo y arrojar luz. Entendemos que una democracia madura debe poder mirar a los ojos a su pasado. Lo que no es de recibo es que conozcamos asuntos de calado a través de servicios de inteligencia de terceros o que historiadores e investigadores tengan que acudir a otros países a investigar hechos ocurridos en el propio.
¿Busca que se esclarezcan los posibles negocios oscuros del ex jefe del Estado, Juan Carlos I?
La iniciativa de nuestro Grupo no persigue un objetivo concreto, sino la actualización de una norma del año 68 que ayudaría a esclarecer algunos asuntos que han permanecido ocultos y con un secretismo poco comprensible.
¿Cuenta el PNV con el apoyo de alguno de los partidos estatales (PSOE, PP, Cs, UP) o al menos ha tratado de negociar con ellos enmiendas a la propuesta?
Es la cuarta vez que nuestro Grupo propone esta reforma legislativa. Al parecer, es un asunto espinoso para algunos partidos, que se han esforzado en entorpecer su tramitación. Esa es la experiencia que tenemos. Pero vayamos paso a paso; confiamos en que sea aceptada a trámite y que esta vez pueda tramitarse a tiempo, sin que lo oculten en un cajón como sucedió en la XII Legislatura.
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