"Sólo Perú está peor que España". Ese es el argumento que ha elegido Pablo Casado para arremeter contra Pedro Sánchez y su gestión de la pandemia. Tal y como viene haciendo desde hace días, el candidato conservador ha hablado de "negligencia" y ha llamado al resto de partidos de la Cámara a aprobar una "comisión de investigación".
A ojos de Casado, la fiscalía -Dolores Delgado- se ha "convertido en una comisaría política que impide" las averiguaciones sobre la actuación del Ejecutivo en relación a la Covid. Tal y como adelantó EL ESPAÑOL, este órgano no ve motivos para llevar a cabo esa acción.
"En vez de aceptar el plan económico que le proponemos, usted anuncia recortes sociales que nos recuerdan a Zapatero. En vez de aprovechar la bonanza que dejó el PP, usted se fundió la caja para ir dopado a dos elecciones", le ha recriminado Casado.
No han pasado ni veinticuatro horas desde que el Gobierno lanzara en el Consejo de Ministros la llamada "ley de Memoria Democrática". Una circunstancia que el contendiente del PP no ha dejado pasar: "Quiere juzgar lo que ocurrió hace ochenta años, pero pretende tapar lo que sucedió hace ochenta días".
Una clara referencia a la nueva norma, que apuesta por la creación de una nueva fiscalía que investigue hechos de la guerra civil y la dictadura. Más allá del juego de palabras, el discuro de Casado ha sido en clave económica.
"Sube las cotizaciones a los autónomos. Pone freno al salario mínimo y pone un embudo en el Ingreso Mínimo vital. Anuncia subidas fiscales y la derogación de la reforma laboral. ¿Es esto lo que oculta el Presupuesto que negocia con los batasunos? ¿Qué más recortes va a hacer?", ha arremetido.
Pero Sánchez le estaba esperando: "¿Recortes? Los únicos recortes que necesita España son los recortes de la corrupción del PP. Cumplan con la Constitución del primero al último de los artículos".
A su vez, también en orden económico, el presidente ha aseverado: "Hemos subido el SMI, hemos revalorizado las pensiones y hemos recuperado poder adquisitivo. También hemos dictaminado la extensión de los ERTE".
"¿Lo dice quien tiene un vicepresidente cuyo partido está siendo investigado por financiación irregular? ¿Le cesará si es imputado? ¡Diga la verdad a toda España!", ha respondido rápido el del PP. Un interrogante que Sánchez ha esquivado.
En esta ocasión, como réplica, el líder socialista ha elegido el caso Kitchen: "Taparon un delito con otro. Dice que no va a pasar ni una. Me gustaría creerle. Ponga fin a treinta años del PP incumpliendo las leyes".