Cataluña contará con una agenda espacial y pondrá en órbita dos nanosatélites. Para ello, el Govern invertirá 2,5 millones de euros con el objetivo de mejorar la conectividad y observar la Tierra, en el marco de una estrategia que busca impulsar un nuevo sector económico y generar 1.200 empleos.
En cuatro años, la Generalitat gastará 18 millones de euros en crear una NASA catalana, una decisión que para el conseller de Políticas Digitales y Administración Pública, Jordi Puigneró, es "un paso modesto para la humanidad, pero grande para Cataluña".
"Estamos ante una gran oportunidad para situar Cataluña en una economía incipiente: la nueva economía del espacio de órbita terrestre baja", ha escrito Puignerò en un artículo en el diario El Punt Avui.
Asegura que la puesta en órbita de dos nanosatélites por parte de la Generalitat representan "un cambio de paradigma en la manera de desarrollar misiones espaciales", ya que generan una nueva economía que parte de la denominada "democratización del espacio", hasta ahora, dice Puignerò, "reservada a las grandes potencias mundiales y los gigantes de la industria aeroespacial".
El conseller se felicita porque Cataluña haya dado este importante paso cuando hasta ahora "muchos países" que no tenían la capacidad de impulsar "una industria aeroespacial propia" han sido capaces de lanzarse "a la conquista de esta nueva economía del espacio".
"Un Estado emprendedor"
En el artículo, además, explica que estos nanosatélites que Cataluña pondrá en órbita son de "bajo coste" y permitirán "hacer llegar la conectividad 5G a zonas remotas y desarrollar nuevos servicios digitales vinculados a la agricultura, la meterología, la seguridad, las emergencias, el transporte y la logísitca".
Los nanosatélites, que tienen un coste de fabricación de entre medio millón y unos dos millones de euros, pesan de uno a 10 kilogramos y orbitan a hasta 2.000 kilómetros de altura de la tierra, con una vida útil de unos cuatro años.
Puigneró ha defendido durante toda la semana que con esta estrategia el Govern actúa como "un Estado emprendedor", ya que, según sus cálculos, cada euro invertido en este sector se multiplicará por 15 en términos de PIB.
"Nos decía José Manuel García-Margallo, quien fue ministro de Exteriores español, que 'una Cataluña independiente vagaría por el espacio'. Pues bien, ya hemos dado el primer paso. Un paso modesto para la humanidad, pero un gran paso para Cataluña y su economía", afirma Puignerò en su artículo.