El programa electoral de En Comú Podem pide no sólo la autodeterminación, sino que aspira a la república catalana en una España federal... aunque la audaz estructura jurídica que se sugiere no queda explicada en ninguno de sus puntos, y eso que el cabeza de cartel fue un conocido abogado, Jaume Asens.
Este letrado es hoy el presidente del Grupo Parlamentario Confederal de Unidas Podemos - En Comú Podem- Galicia En Común. Y este martes ha arremetido de lleno contra el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, a pesar de ser líder de uno de las dos formaciones del Gobierno de coalición.
"La pericia y la rapidez que usted ha demostrado en la reforma de la Justicia que reflejan estos Presupuestos", dijo Asens en el debate sobre la sección 13 de las cuentas públicas, la tocante al departamento de Juan Carlos Campo, "contrasta con la torpeza y la lentitud que ha mostrado a la hora de afrontar tareas pendientes en la administración de Justicia".
Exige de inmediato Unidas Podemos recuperar la reforma del sistema de elección del Consejo del Poder Judicial. Si bien el argumento de Asens era poco fundado, ya que dijo apoyarse "en la Comisión Europea cuando dice que hay que poner fin a la situación de secuestro y atrincheramiento que la derecha mantiene en el gobierno de los jueces".
Lo cierto es que Bruselas sí que se ha mostrado preocupada por el estado de interinidad en el que lleva el CGPJ dos años, pero mucho más inquieta por la reforma impulsada por el Gobierno, que podría politizar aún más el Poder Judicial. En todo caso, el portavoz morado atacó al ministro Campo de manera preventiva, no fuera a ser que de verdad haya pactado con el PP: "Es intolerable, y preocupa que saliera a los medios un supuesto pacto inminente con el PP, aunque ellos lo hayan negado".
Otro palo de Bruselas
Asens, experto en al menos la otra de esas tareas pendientes al haber formado parte del equipo de abogados que aconsejó a Carles Puigdemont en su huida de la Justicia española, sabía de lo que hablaba cuando exigía "ya" la rebaja del delito de sedición... algo que también está incluido en el programa de su formación. Como una de las opciones para solucionar el "conflicto político" en Cataluña.
Según el político catalán, tanto los "tribunales europeos" -aunque no dice cuáles-, como Amnistía Internacional y "la mayoría de juristas de este país" -tampoco aquí los contabiliza ni da nombres- están de acuerdo "sobre la reforma del delito de sedición". Es decir, con su rebaja.
El argumento pretende sostenerse en los sucesivos reveses con la Administración de Bélgica y la Euroorden de Puigdemont. O en la negativa de Alemania a extraditar al expresident por el delito de rebelión... pero nada se decía en los fallos procedentes de Bruselas o Berlín a ese respecto.
También se da la circunstancia de que este mismo martes, el portavoz de Justicia de la Comisión Europea, Christian Wiegand, ha reclamado que el Gobierno no la use de excusa... porque tampoco cuela. "Las posibles reformas del Código Penal son competencia de los Estados miembros. No ha habido recomendaciones de la Comisión en este caso, es una competencia de los Estados miembros", dijo preguntado durante la rueda de prensa diaria.
"¿Cuánto tiempo necesita?"
Entonces, ¿esto es un mero cambio de cromos para lograr votos de ERC y PDeCAT, como había dicho minutos antes Edmundo Bal? "No es verdad eso", repuso Asens. "Es nada menos que un compromiso de legislatura entre Unidas Podemos y el PSOE". Y añadía el abogado morado que al ex abogado d el estado, hoy en las filas de Ciudadanos, "le preocupa que la Justicia apuntale derechos y libertades y se aleje del siglo pasado".
Pero lo cierto es que además de un compromiso de legislatura, la reforma del delito de sedición es algo que incomoda a Juan Carlos Campo, ministro de Justicia. De ahí quizá sus justificaciones cuando se le pregunta por ello. "Estamos obligados a hacer esa revisión como país democrático en un entorno europeo y que tiene que armonizar esta cuestión por exigencias europeas", aseguraba Campo en una entrevista el pasado fin de semana. Dos días le ha durado la excusa, pues la Comisión Europea ha decidido desmentir públicamente este argumento.
También le incomodaba a Campo escuchar desde el banco azul cómo su socio le echaba la bronca desde la tribuna: "Ha habido una pandemia, es cierto, pero no se explica, señor ministro, que llevemos un año de Gobierno y no haya una sola propuesta concreta sobre la mesa", le espetó a la cara Asens. "Ni tan siquiera nos han respondido a la nuestra... ¿Cuánto tiempo se necesita?".
Campaña catalana
Como es el debate de Presupuestos tras las tomas de posición no hay réplicas. Y Campo se debió de quedar con las ganas de contestar que esto no es un "retraso" sino que la reforma del Código Penal en la que se encuadró la rebaja de la sedición y la rebelión aún se está diseñando. Que por ahora Justicia ha estado centrada en la nueva Ley de Enjuiciamiento Criminal, recién presentada.
Ahora, quien posiblemente quedaría incómodo al acabar el debate fue Asens. Probablemente, nadie le avisó de que la Comisión Europea acababa de reventar el argumento de que la rebaja de la sedición viene de la UE. Así que el presidente del grupo de los de Iglesias mantuvo su argumento preparado: "Celebramos que Europa le hay abierto los ojos en este asunto, ministro, pero queremos pasar de las palabras a los hechos, y no podemos esperar más".
Y es que las prisas acuciaban este martes a Unidas Podemos, que quiere apuntarse cuantos más réditos mejor antes de que se aprueben los Presupuestos y que quiere sacar la cabeza en una campaña catalana en la que no logra destacar... aunque sea sacando ventajas para otros, como sería la de la excarcelación de Oriol Junqueras y los suyos gracias a una reforma exprés: "Cada día que pasa sin abordarse esto por justicia es un día más de injusticia", sostuvo Asens.
"Las próximas elecciones catalanas tienen que celebrarse en normalidad y es una anomalía que haya presos independentistas en prisión", concluyó.