EH Bildu busca seguir creciendo. Para tratar de sumar adeptos a su causa independentista, Arnaldo Otegi ha impulsado una campaña de afiliación en la que ofrece el "derecho a la formación política" a los nuevos militantes.
En su página web, reconfigurada para la ocasión, la coalición abertzale garantiza parte de su propiedad a quien se haga "bilkide". Esto es, a quien se afilie.
Tras identificarse y aportar sus datos personales, los nuevos afiliados podrán también "impulsar el cumplimiento de los objetivos políticos de EH Bildu", "participar en los actos" o "ser elegido o elegida para los cargos de representación interna o para las listas electorales".
Detrás de la iniciativa está la necesidad de la formación abertzale de tener unas raíces fuertes en País Vasco y Navarra ahora que se sabe un actor relevante en la política nacional y puede vender ante su electorado los frutos que arranquen al Gobierno.
Y es que a su reciente apoyo, por primera vez en la Historia, a los Presupuestos Generales del Estado se suma la voluntad del vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, de incorporar a los de Otegi a la "dirección de Estado", pese a los excesos de su programa electoral, que los hacen incompatibles con esta tarea.
El acuerdo para dar el "sí" a los PGE, por cierto, fue refrendado por la propia militancia de Bildu, cuya amplia mayoría (91,7%) avaló el apoyo. En dicha consulta, eso sí, participaron sólo 1.588 personas, razón por la cual Otegi puede haber caído en la cuenta de la necesidad de agrandar sus bases.